Además de con Andrea, Castillo de Aínsa cuenta en esta edición con otros nombres de mujer como Imelda May o la aragonesa Ariadna Redondo en la música, Marta Bautista en el teatro, Natividad García con una instalación creativa o Rosa Gómez, autora del cartel de esta edición, con su preciosa exposición en torno a la naturaleza y los paisajes ‘Caminando en la oscuridad’ en la pintura.
Mención aparte merece la gran dama del teatro independiente español Petra Martínez, elegida para poner el broche de oro final a la XXVII edición. Petra es conocida por el gran público por su trabajo en series de gran éxito televisivo como ‘La que se avecina’ o ‘Sé quien eres’, ha participado en más de 20 películas y tiene en su haber, entre otros, tres premios de la Unión de Actores a Mejor actriz y una Biznaga de plata por su trabajo en el cortometraje Libre directo. Cofundadora junto a Juan Margallo de la compañía Uroc Teatro en 1985, recibieron la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en 2011 y es con esta misma compañía con la que se encargarán de la clausura del Festival. La obra, Una mujer en la ventana; un texto que invita a la reflexión sobre el proceso de hacerse mayor y las renuncias que esto supone en la sociedad actual, una puesta en escena que emocionará seguro al público con una presencia arrolladora de Petra sobre el escenario.
Castillo de Aínsa también guarda un sitio para las mujeres que no han hecho de la cultura su profesión aunque sin embargo la han desarrollado a lo largo de su proceso vital. Un homenaje a esas mujeres que les han cantado a sus hijas e hijos canciones tradicionales evitando así que cayeran en el olvido, que han segado con sus manos el trigo mientras contaban viejas historias, que al calor de la lumbre han recitado poemas nacidos del vientre de las montañas. Por ello, la primera jornada del Festival tendrá lugar una actuación en forma de homenaje que contará con la colaboración de la formación musical MaríaConfussion, y que brindará su reconocimiento a seis mujeres anónimas del Sobrarbe. Ellas decidirán si cantan, recitan o nos cuentan un cuento en este espacio diseñado específicamente para ellas. Todo un ejemplo de sensibilidad hacia el universo femenino.