Tras más de dos décadas buscando una alternativa al suministro de agua, el Ayuntamiento de Alerre empieza a “ver la luz al final del túnel”, después de que la Diputación Provincial de Huesca asumiera la elaboración del proyecto para el suministro desde la red que llega a la capital oscense. “El agua es primordial”, resume el alcalde de la localidad, Francisco Santolaria. La previsión es que a finales de año puedan empezar las obras, que no requieren complejidad, con lo que la conexión será “rápida”, estima.
La mejora en el abastecimiento permitirá solucionar los problemas derivados de la presencia de nitratos en los manantiales subterráneos, que han obligado a los vecinos durante estos años a recurrir al agua embotellada. La Diputación asume buena parte de las obras, 645.000 euros, mientras que los ayuntamientos de la mancomunidad, formada por Alerre, Chimillas y Banastás, aportarán 120.000 euros en total. De forma paralela, el Ayuntamiento ha acometido, con fondos propios, algunas mejoras como la entrada al depósito de agua de Alerre, para su puesta en funcionamiento en cuanto esté acabada la conducción.
La mejora del suministro será la obra más importante de este mandato junto con la actuación en el barranco de la Bala que, en distintas fases y con el apoyo económico de instituciones como la DPH, evitará que haya problemas e inundaciones ante lluvias intensas. Para ello se destinan diferentes aportaciones para la reparación y restitución de las infraestructuras dañadas, trabajos que podrían estar acabados al finalizar el año.
