Por Lola García Casanova
Magnífica mañana de septiembre para visitar Capdesaso. Julia Campdepadrós ya me espera con su bebé Leo. Se unen Raúl Peralta, su marido, y Sara Paúl a esta conversación. Hablamos sobre la Asociación Cultural Ganchina-El Soltador de Capdesaso y muchas otras cosas.
Ellos son vecinos y miembros de la junta de esta entidad que añade vida a esta población.
Entre sus valores: la necesidad de unión. La importancia de establecer vínculos entre los vecinos y de organizarse para disfrutar, aún más de la vida en los pueblos.
-La Asociación Cultural Ganchina-El Soltador nació hace 9 años, no son muchos…
-La movimos los jóvenes. Por supuesto que el Ayuntamiento se ocupaba de temas de ocio… pero veíamos que nos faltaba algo. Creamos la asociación y los mayores y los que viven fuera la respaldaron.
-Dicen ustedes que en Capdesaso si se juntan seis personas ya hacen bingo.
-¡Sí!, hay que financiarse. La cuota resulta testimonial y la lotería de Navidad la vendemos sin recargo ¡así somos! Pero sobre todo destacamos la colaboración: si hay que recoger, limpiar, montar… lo hacemos entre todos. Así ha sido siempre. Además, organizas una actividad y nunca estás solo. Hay una buena respuesta. Con las actividades das vida al pueblo y, a los que viven fuera, les ofreces una buena excusa para que vengan.
-Organizan para el pueblo y para los vecinos `del fin de semana´.
-En Capdesaso vivimos muy poquitos y centramos los actos en fines de semana y periodos de vacaciones. Contamos ya con un calendario establecido a lo largo de todo el año que nos da, de momento, buenos resultados. En enero: la asamblea de la asociación y cena. En febrero: la reforestación con la colaboración del Ayuntamiento. Un día muy majo, con almuerzo y sartenada. Dos viajes al año. En mayo, coincidiendo con las fiestas, organizamos una cena el jueves y la asociación, además, recuperó la tradición de plantar el mayo. Y así a lo largo de todo el año.
-Algún acto se ha convertido en un imprescindible del pueblo como la ronda de belenes en Navidad
-¡Lo mejor del año! En Navidad se organizan muchas cosas. Comenzamos ya con el puente de la Constitución. En la ronda de belenes vamos de casa en casa visitando los nacimientos cantando y tocando la guitarra. En unos pueblos funcionan unas cosas, en otros otras. Hay que ir probando y dejando lo que funciona.
-Me dicen que las propuestas se comentan en la asamblea ¿no vale en la barra del bar?
-Si luego la echan al buzón de sugerencias ¡sí! y luego se discute en la asamblea ¡que para eso se convoca! Aquí estamos abiertos a todo y discrepancias las hay. Sin embargo, como vecinos y como socios, valoramos por encima de todo la unidad. La unidad resulta importante, pero en los pueblos pequeños es imprescindible.
-Además la asociación otorga el Gancho de Honor.
-Una manera de reconocer el trabajo y la dedicación de vecinos. El primer Gancho de Honor lo entregamos al jotero José Antonio Villellas; este año a Ángel Miguel Capuz quien ha sido concejal durante 32 años.
-Me resulta curioso el nombre Ganchina-El Soltador.
-Ganchino por cómo nos llaman a los de Capdesaso y El Saltador por cómo llamamos nosotros a la plaza de la Iglesia.
