Aínsa-Sobrarbe vuelve a cerrar el ejercicio con superávit en las cuentas. El resultado ha sido de 137.748 euros de superávit. Como gastos más importantes destaca el de personal, que ha ascendido a 1.113.759 euros (un 33% del gasto), el de bienes corrientes y servicios 1.014.164 euros y el de inversiones reales 794.748 euros, se ha amortizado 100.890€ y los gastos financieros tan solo han sido de 11.798 euros (0,35 %)
Ha cumplido tanto la regla de gasto, la estabilidad financiera y el nivel de deuda, se debe 501.794 euros, siendo el porcentaje de nivel de deuda de 16% (el máximo permitido por ley está en 110%). El cumplimiento obligado de estas tres reglas financieras provoca casi obligatoriamente que los ayuntamientos acaben el año con superávit, el cual pasa a ser remanente, en los últimos cuatro años el remanente del ayuntamiento ha aumentado 478.361€, siendo en la actualidad 1.379.748 euros.
El gasto del remanente se ha flexibilizado un poco y este año el ayuntamiento ha podido disponer de 172.816 euros, consideramos primordial el poder disponer del remanente o beneficio generado durante estos últimos años, para seguir realizando algunas de las necesidades más importantes de los 25 pueblos que forman el municipio.
Por otro lado ya se han finalizado las últimas actuaciones correspondientes a los presupuestos del 2018, el arreglo del pavimento de la Calle de la Morisma, en el casco antiguo de Aínsa y el acondicionamiento del Parking del 88, estas dos actuaciones se han realizado con fondos propios y los importes han ascendido a 36.513 euros y 83.805 euros respectivamente.
