El diputado socialista Álvaro Burrell ha pedido a la consejera de Educación del Gobierno de Aragón que paralice el proceso de adscripción de varias escuelas infantiles de localidades como Monzón, Barbastro o Calatayud a respectivos centros públicos porque “ha generado familias de primera y familias de segunda”.
Así lo ha planteado en la última sesión plenaria de las Cortes, en la que ha denunciado que este cambio que ha hecho el Gobierno de Aragón en la adscripción de centros educativos “genera discriminación a la hora de elegir centro educativo” y ha argumentado que las AMYPAS de estos municipios están ya recogiendo firmas para pedir que se elimine las adscripciones de las escuelas de educación infantil Nuestra Señora de la Alegría y La Paz en Monzón y Barbastro. El Consejo Escolar de Monzón ha manifestado igualmente su postura contraria a esta adscripción.
“Para entrar en una escuela infantil del Gobierno de Aragón hay casi siempre un sorteo, porque al final casi todo el mundo tiene los puntos mínimos para entrar; y se da la circunstancia ahora con la adscripción que hay unos “privilegiados que entran” y eso genera un privilegio en doble sentido: porque esos niños y niñas van a poder elegir lo que quieran pero no así las familias que por distintas circunstancias han tenido a sus hijos en su casa hasta los 3 años, o los han llevado a un centro municipal o uno privado, ya que al no estar adscrita la Escuela Infantil al colegio público, quedarían fuera”.
Monzón y Barbastro sólo cuentan con una escuela infantil de la DGA en cada localidad. En cada una de estas escuelas infantiles hay dos vías en edades 2-3 años, que suman unos 36 alumnos en cada una de ellas para tres colegios públicos en cada localidad (con una media de dos vías cada uno para edades de 3 y 4 años, que suman aproximadamente un total de 144 plazas en edades 3-4 en cada localidad). “Esto hará que la mayoría de las pocas plazas vacantes (para la demanda solicitada que presenta cada año) de la EEI Ntra. Sra. de la Alegría y La Paz las ocupen niños y niñas con hermanos o hermanas mayores escolarizados en los CEIP adscritos a ellas, dejando sin apenas opciones a futuros escolares sin hermanos a la hora de poder tener una plaza en una EEI de estas localidades.
“Se ha generado un problema donde no lo había y se pide continuar como hasta ahora y que todos los alumnos partan de las mismas condiciones a la hora de elegir centro educativo”, ha dicho el diputado. “Vayan con el bisturí y no con la motosierra”, ha dicho Burrell a la consejera de Educación.