La subdirectora y las restauradoras del Museo Diocesano de Barbastro-Monzón, coordinadas por su director, Ángel Noguero, han abierto los veinte paquetes que el lunes 22 de febrero devolvió, por mandato judicial, el Museo de Lérida. Como ocurriera el pasado 15 de febrero, un notario, asistido por un fotógrafo, ha documentado todo el proceso, que se prolongó durante cuatro horas y contó con la presencia de la directora general de Patrimonio del Gobierno de Aragón, Marisancho Menjón. Cada uno de los bultos se ha cerrado y todos ellos, junto con las dos primeras cajas, permanecen en los almacenes del Museo Diocesano.
Como es sabido, el pasado 15 de febrero era la fecha tope para el regreso de las 111 obras de arte sacro aragonesas, según el auto de ejecución provisional de la sentencia de diciembre de 2019, dictado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Barbastro. Ese día regresaron las primeras 23 piezas y, una semana después, las cinco que completarían el grupo de 28 que Consorcio y Obispado de Lérida ya habían reconocido tener en depósito. El resto, 83, cuya propiedad dictaminó la Justicia en favor de las parroquias aragonesas, llegarán en los próximos días, según ha manifestado públicamente el propio Consorcio del Museo de Lérida.
