El salón de plenos del Ayuntamiento de Barbastro presentaba un lleno espectacular y con dos sentimientos contradictorios: la alegría y la ilusión entre las filas que apoyaban al nuevo alcalde del PP y la melancolía de los simpatizantes socialistas que decían adiós a 20 años de gobierno municipal pero que querían mostrar su cariño a Antonio Cosculluela.
El Partido Popular, con Fernando Torres a la cabeza y un equipo joven y muy renovado, ha logrado la mayoría absoluta de los votos de los concejales con 10 votos (de 17) y esta mañana de sábado de junio ha sido elegido alcalde con el apoyo de Ciudadanos (2), Partido Aragonés (1) y VOX (1).
Los cinco ediles del PSOE han votado a Antonio Coscullela y Marisol Cáncer y Ramón Campo se han votado a sí mismos. Junto a Torres, Cosculluela ha sido el gran protagonista con dos largas y cálidas ovaciones de agradecimiento. La primera de ellas a petición de Ramón Campo en su discurso de constitución de mesa de edad. También sirve como anécdota que ha sido el concejal Ramón Campo quien le ha entregado el bastón de mando a Torres, cuando hubiera sido procedente que el traspaso lo efectuase el alcalde saliente.
En su discurso, ya como alcalde y bastante emocionado, Fernando Torres ha afirmado: «No creo en las políticas de partido, y estudiaré todas las ideas vengan de dónde vengan». Mostró su compromiso con el desarrollo empresarial de Barbastro y aseguró que se sentía honrado y orgulloso de la historia de la ciudad «no podemos olvidar de dónde venimos». Agradeció a simpatizantes, votantes y su familia el apoyo recibido.
