Ursi Abajo, de Formigal, una eminencia en la montaña, (en la fotografía inferior), y Segis Martínez, (instantánea superior), de Panticosa, guarda del refugio Casa Piedra en el Balneario y en el de Bachimaña, nos han desgranado todo lo que hay que saber sobre unos de los tesoros del Valle de Tena, los Ibones. Palabra aragonesa, son uno de los grandes atractivos del Pirineo, aptos para todos los niveles y edades. No deja de ser la montaña, y es aconsejable como siempre informarse e ir bien preparado.

Por Alfonso Sanz

Lo primero que nos aclara Ursi es que no todas las concentraciones de agua que hay en la montaña son ibones. Éstos son los que no reciben el agua de ríos, sino que se forman con las filtraciones subterráneas que sacan de forma natural. Su preferido es el de Tebarrai. Un circo muy bonito, rodeado por picos pirámide en el valle de Respumoso, en Sallent de Gállego. Se llega cogiendo la GR-11, y recorriendo Sallent, La Sarra, Respumoso, y Collado de Terrabai donde está el ibón. Aunque este año no ha llovido mucho, los que conoce Ursi en la zona no se han secado, aunque sí que se puede llegar a ese extremo. En cuanto a la fauna que los habitan destacan los tritones.

Segis también es un experto en ibones. De hecho, el refugio de Bachimaña tiene los que le dan nombre, y el Inferior. Su variedad y su belleza paisajística son parte de su encanto. Le cuesta elegir solo uno, le gustan más los naturales que los que están represados, pero todos tienen algo, desde los pequeños a los grandes, hasta los que están más escondidos. Nos cuenta algunas excursiones adaptadas a cada nivel.

Un ibón para hacer con la familia, el de Ordicuso o charcas de la rana. Desde el Balneario cogemos el camino que lleva al Garmo Negro y Argualas, a los 30-40 minutos se llega a un plano o mallata, donde aunque no está indicado, se coge una senda a la izquierda hasta encontrarlos. En Panticosa, con la telecabina, nos invita a subir al de Sabocos y al de Asnos. En Piedrafita su ibón también es asequible desde Lacuniacha, en la cara norte de Peña Telera.

Pasamos a un nivel medio, y Segis nos recomienda los de Brazato, a 2.300 metros de altitud y con 700 de desnivel. También se empieza desde el Balneario. Son dos horas y media de subida. A 20 minutos, una vez que has llegado al destino, hay tres más.

Para un nivel ya de más exigencia, los de Bachimaña. GR-11 hacia el Refugio de Respumoso, pasas el Inferior y el Superior, que es muy grande, y luego vienen los Azules, bajo el Pico Infiernos. A continuación está el de Tebarrai, encerrado que parece un volcán. Pero para llegar allí desde el Balneario ya hay que tener unas capacidades físicas mayores. Son alrededor 4 horas.

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