Tras poner en marcha en 2020 y 2021 el Plan de Fomento de la Vivienda, destinado a mantener la población y fomentar la llegada de nuevos habitantes al medio rural de la provincia a través de viviendas destinadas al alquiler a un bajo coste, la Diputación Provincial de Huesca ha creado una nueva línea de ayudas a los consistorios del Alto Aragón que cuenten con núcleos de población de menos de 1.000 habitantes.
Se trata de subvenciones dirigidas a la compra de solares o edificios para destinarlos a viviendas, continuando así con el objetivo de mantener vivos los pueblos de la provincia solucionando uno de sus grandes problemas: la escasez de ofertas de alquiler en los pequeños municipios del Alto Aragón.
Cada consistorio podrá presentar hasta dos solicitudes a lo largo de este 2021, para lo que se establecen tres periodos: el primero se extiende hasta el 30 de abril, el segundo se abrirá entre el 1 de mayo y el 15 de junio y el último entre el 16 de junio y el 30 de septiembre.
Como ocurre en el caso de los préstamos del Plan de Fomento de la Vivienda, los inmuebles deben destinarse al alquiler a nuevos pobladores, con una cuota máxima de 240 euros al mes y por un mínimo de 2 años. Se entienden como tal aquellos que no estén inscritos en el Padrón Municipal y que realicen o vayan a realizar su actividad laboral, económica o profesional en el municipio o su entorno. También se puede destinar esta vivienda a jóvenes de la localidad, inscritos en el Padrón Municipal y menores de 40 años, que establezcan en estas viviendas su residencia habitual.
La cuantía de la subvención tanto en el caso de la compra de edificios como solares, será diferente en función de la antigüedad del mismo, pudiendo llegar hasta los 80.000 euros máximo. Estas subvenciones son compatibles con otras ayudas públicas, así como complementarias con el Plan de Fomento de la vivienda.
