El Ayuntamiento adjudicó a la empresa Paobal las obras de la fase 5-A de ampliación del cementerio municipal, por un importe de 158.600 euros (IVA incluido) y plazo de ejecución de un mes. Los trabajos comenzarán la semana que viene.
La fase 5 prevé un total de 432 nichos, es decir, seis bloques de 72 unidades. En la primera actuación se colocarán dos bloques y en la segunda, cuando se decida acometerla, el resto. Los 60 nuevos columbarios darán continuidad a los habilitados meses atrás por el Ayuntamiento en la parte alta del recinto.
El proyecto incluye el acondicionamiento de una plazoleta-estancia que “romperá” la monotonía de los bloques de nichos que bajan paralelos al vial de acceso al cementerio. Así mismo, se habilitará una segunda puerta de entrada justo enfrente de la plazoleta (paso para peatones y vehículos), lo que evitará a los visitantes el rodeo al que obliga la puerta principal.
El alcalde, Álvaro Burrell, apuntó que esta segunda entrada le había sido requerida por muchas personas, sobre todo de edad avanzada. Las últimas estadísticas indican que se venden más columbarios que nichos. Por esta razón, no se considera necesario acometer la fase 5 en su conjunto.
