Sesenta esquiadores procedentes de diversos puntos de la geografía nacional además de los 10 acompañantes de la organización tomaron parte este pasado sábado en la octava edición de los “Trancs de les Maladetes” de esquí de montaña sobre un circuito diseñado en el entorno del Parque Natural Posets-Maladeta. La salida tuvo lugar a las seis de la mañana desde la zona de los Llanos del Hospital, donde se realizó un control exhaustivo de material de los participantes para minimizar riesgos.
El evento estuvo organizado por la Agrupación Deportiva Hospital de Benasque y la Estación de Esquí Nórdico y Montaña de los Llanos del Hospital con la colaboración del Hotel Hospital de Benasque y Deportes Aigüalluts en una edición que estuvo marcada por el cambio de recorrido sobre el originalmente previsto para garantizar la máxima seguridad y calidad de la nieve a los participantes. Así, la propuesta original, un recorrido circular “Valle de Remuñe-Portal de Remuñe-Valle de Literola”, fue modificada por una ascensión al Pico Abadías y sus 3.279 metros de altura tras cambiar también la fecha inicial prevista -el día 21 de abril- para extremar la seguridad ante el peligro de avalanchas y asegurar buena nieve dado lo avanzado de la temporada.
Confirmando el parte meteorológico, el día amaneció húmedo desde primeras horas y con ambiente templado, encontrándose los participantes con nieve húmeda y niebla, lo que añadió dureza al ya exigente recorrido. Aún así, los participantes lo afrontaron con gran ánimo llegando a línea de meta los primeros a las 11 de la mañana mientras que el último grupo lo hizo cuatro horas más tarde.
Esta “Trancs” –palabra que en el patués vernáculo significa “zancadas”- es catalogada como una marcha popular de esquí de montaña y está dirigida a esquiadores que teniendo un alto nivel de esquí alpino, no están tan suelto en la otra modalidad y prefieren compartir recorrido con personal experto como el que facilita la organización d ela carrera benasquesa. Son técnicos de esquí de montaña que, una vez más, se ocuparon de coordinar y estructurar la salida de esquí en la que todos los que tomaron parte llevaron su ritmo y siempre con la supervisión de socios de la A. D. Hospital de Benasque, especialistas en este deporte.
Para una óptima organización, en el itinerario se habían diseñado -en La Renclusa, el Portillón Superior y el Collado Maldito- que los participantes tenían que alcanzar en un horario determinado, para finalmente coronar el Pico Abadías aproximadamente a las 12,30 como hora límite; si no era así, estos esquiadores emprenderían el descenso siempre con la compañía de uno de los expertos esquiadores. No obstante, debido a falta de visibilidad por la niebla, el grupo no pudo pasar del Portillón Superior, reagrupándose los esquiadores y comenzando el descenso a través del Collado de Paderna y los Tubos de Paderna.
En la Renclusa, los guardas colaboraron con la actividad y, como en años anteriores, sorprendieron a los participantes con un magnífico avituallamiento que todos agradecieron, retomando la marcha con renovadas fuerzas.
En un momento de la ascensión se organizó para los más competitivos un sprint cronometrado que tuvo como vencedores a Silvia Puigarnau, de la A.E. Matxacuca, y a Guillermo Blanchard, del Reicaz.
La jornada finalizó con una comida de hermandad en el Hotel Hospital de Benasque y la entrega de las tradicionales “esquellas”, como trofeos, y de distintos obsequios deportivos.
