Los Reyes Magos de Oriente junto al príncipe Alí y los pajes recorrieron los pueblos de Bierge, Buera, Colungo, Alquézar y Radiquero. En todos fueron muy bien recibidos por un montón de niños deseosos de ver a sus majestades de cerca y que les dieran los regalos. Unos fuegos artificiales anunciaban en cada pueblo la llegada de los Magos y, animados por la charanga, la comitiva se dirigía hasta el lugar donde se repartían los regalos. Antes, habían conversado con los niños para ver cómo se portan. En la despedida se entregó a los reyes un obsequio (un lote de productos de la zona como licores de Colungo o aceite de Bierge).
Esta cabalgata que se viene haciendo desde hace más de treinta años y entre todos esta el compromiso de seguir muchos años más llevando la magia de esta noche a los pueblos más pequeños.