Por Ana Pascual
Esta madrileña pero jaquesa de adopción participará en el #RetoTrasatlantica16, también conocido como #RetoPelayoVida16 en que junto a otras cuatro mujeres, que han pasado por un cáncer y lo han superado, van a cruzar el Atlántico a bordo del Cannonball. Se trata de un impresionante velero que ellas mismas llevarán hasta La Martinica supervisadas en todo momento por el director Eric Frattini y el capitán Diego Fructuoso junto con un médico del Grupo Hospitalario. El próximo miércoles 16 de noviembre partirán desde Tenerife hacia Martinica en una travesía de 14 días.
– ¿Cómo llegaste hasta Jaca?
– Trabajo como guardia civil de tráfico así que desde Barcelona decidí trasladarme hacia la montaña, que me encanta, como motorista de tráfico y al ascender a sargento ahora estoy trabajando en Huesca.
– Sufriste un cáncer de mama, ¿cómo empezó todo?
– Yo me lo detecté en mayo de 2015, me noté como un bulto parecido a una lenteja, Fui al médico y me dijeron que no era nada, simplemente líquido. Después vi que me crecía y volví en julio, el cirujano notó algo y, finalmente, me hicieron una punción donde detectaron que era un cáncer de mama. Me operaron el 31 de agosto de 2015 y para finales de septiembre fui a mi oncóloga, me traté seis meses de quimioterapia para seguir con dos meses de radio que termine el 31 de mayo de 2016.
– ¿Que sentiste cuando te lo confirmaron?
– Recuerdo que venía conduciendo de Zaragoza con el manos libres y mi cirujano me dijo “tengo que darte una mala noticia” y yo le contesté “¡ya me la has dado!”. En ese momento lo fui asimilando y pensé sobretodo en mi familia y en cómo iba a decírselo a mi madre que vive en Madrid.
– Cuéntanos, ¿cómo te sumergiste en el #RetoTrasatlantica16?
– Una amiga de Huesca, donde trabajo ahora, me comentó el proyecto y me apunté. Eric Frattini, director del reto, me llamó y estuvimos hablando durante más de una hora.
– Ya habéis tomado contacto con el mar de Valencia hasta Ibiza y Fomentera…
– Si estoy encantadísima, nos presentamos 73 mujeres y de esas nos seleccionaron a 13. Tras una entrevista en Madrid quedamos tan sólo ocho que durante el mes de julio estuvimos formandonos en verano con Cenautica. En septiembre dios seis las que tuvimos la oportunidad de experimentar una dura travesía desde Valencia (ida y vuelta) rodeando Ibiza y Formentera (180 millas en 40 horas). Fue todo un reto, tanta horas navegando y realizando turnos de tres horas donde nos turnábamos para hacernos cargo del timón, la vela mayor y vela foque; incluso tuvimos que enfrentarnos a una tormenta. Hasta entonces pensaba que ir en moto era lo mejor pero, desde luego, ir en velero es una experiencia increíble.
– ¿En qué consiste el #RetoTrasatlantica16?
– Se trata de cinco mujeres, con vidas e historias diferentes, entre los 37 y los 57 años, que han superado el cáncer y que ahora van a cruzar el Atlántico a bordo del Cannonball. Ellas mismas llevarán este velero hasta La Martinica supervisadas en todo momento por el director Eric Frattini, el capitán, Diego Fructuoso, y por Alberto Francés, médico del Grupo Hospitalario Quirónsalud, servicio médico oficial del reto.
– ¿Qué piensa tu familia de esta aventura?
– Mi madre estaba muerta de miedo y me decía que siempre estoy metida en líos pero ahora está encantadísma. Mi pareja también me apoya en todo y aunque le da algo de miedo cree que después del año tan duro que he pasado me merezco hacer esto y voy a por ello.
– ¿Qué consejo le darías a una mujer a la que le acaban de detectar un cáncer de mama o que esté en tratamiento?
– Que sonría todos los días y sea positiva, se supera aunque es duro. La quimioterapia, por ejemplo, te deja muerta pero hay que seguir sonriendo. Lo malo de estos tratamientos es que te miras al espejo y no te reconoces: te falta pelo, estas blanca y yo me engordé ocho kilos; en esos momentos te preguntas ¿porqué no vuelvo a estar como antes? pero al final se sale.
– ¿En qué te ha cambiado la vida?
– Ahora que lo he pasado me tomo la vida de otra manera, ya no me enfado nunca y menos por tonterías. Antes por ejemplo guardaba todo y lo primero que hice al acabar fue hacer una limpieza completa de armarios y ¡ahora no guardo nada!. de lo que más disfruto es de un paseo al sol y un café con las amigas, es una de las cosas que más valoro.