Tras dos años de obligada suspensión por culpa de La pandemia, se nota en el ambiente que hay ganas de vivir intensamente las ceremonias religiosas organizadas para conmemorar la Semana Santa. Algo que quedó patente este pasado domingo en Graus, donde la Bendición de Ramos y la posterior procesión tuvieron una asistencia multitudinaria, como no se recordaba en esta villa ribagorzana desde hace décadas.
Gentes de todas las edades arroparon con su presencia este simbólico acto con el que dan comienzo las actividades más concurridas organizadas en estas fechas de Pasión, Muerte y Resurrección y que, además, en Graus supuso la presentación ante muchos de los fieles presentes del padre Emmanuel, un sacerdote congoleño que cursa estudios superiores en Roma y que se encuentra estas jornadas de Semana Santa en Ribagorza para apoyar la labor de los párrocos locales. Él fue quien realizó la preceptiva bendición de los ramos de olivo y las palmas portadas por pequeños y mayores y quien presidió la primera de las procesiones que se convocan en esta villa durante estas jornadas de especial recogimiento religioso.
Procesiones que tendrán su segundo capítulo este miércoles con la celebración de una muy singular y característica de Graus como es la conocida como “de las Beatas” o “del Farolé” y que históricamente tuvo una participación mayoritariamente femenina frente a la del Viernes Santo, o del Santo Entierro, en que eran mayoría los hombres. Superadas hace ya muchos años esas barreras sexuales, la procesión del Farolé conserva alguno de sus elementos más característicos como la pervivencia de esos pequeños faroles portados por los procesionantes que iluminan el recorrido. En ella también se representan distintas escenas de las estaciones del Vía Crucis que este año presentan la novedad de que por primera vez en Graus una mujer representará a uno de los apóstoles y es posible que una segunda le acompañe.
La citada procesión del Santo Entierro, vivida como la anterior con un hondo recogimiento, cierra el programa procesional en Graus. Otras localidades ribagorzanas organizan también procesiones el Viernes Santo muy concurridas igualmente en los últimos años, entre ellas Benabarre, Campo, Lascuarre o Roda de Isábena.
