La borrasca que está cayendo en las últimas horas sobre el Pirineo aragonés está teniendo una escasa incidencia en tierras ribagorzanas donde la nieve sólo está haciendo acto de aparición en las cotas más altas de la comarca. El espacio abierto al norte de los Llanos del Hospital de Benasque y, con algo menos de intensidad, el entorno de Cerler son la excepción ya que en estas zonas la nevada empezaba a caer a primeras horas de la mañana y se está prolongando durante buena parte de la jornada dejando espesores de entre diez y algo más de veinte centímetros, lo que hace necesaria la utilización de cadenas para los vehículos que circulan desde Benasque hasta ambos destinos.
Las nubes han sido una constante durante todo el día en la mayor parte del territorio pero dejaban escasas precipitaciones que eran de agua nieve en localidades como el propio Benasque donde borrasqueaba por momentos pero el manto blanco no llegaba a cuajar. Una situación que se repetía en la parte alta del vecino valle del Noguera Ribagorzana, que veía cómo la nevada se quedaba en el Valle de Arán, y que hace temer a muchos de los residentes de la zona que se traduzca en la aparición del molesto viento de norte en los próximos días.
