Por Lola Gª Casanova

Pilar Forniés cuenta con varias experiencias como voluntaria. Sin embargo, desde hace una década se dedica al Movimiento Scout Católico como jefa del grupo Santa Orosia de Jaca-Sabiñánigo. Los scout, una manera de ocio, de entender la vida desde valores como el compañerismo, la colaboración y el cuidado de la naturaleza.

-Una funcionaria de Justicia asiste como cocinera a un campamento y acaba de jefa del grupo Santa Orosia Sabiñánigo-Jaca del Movimiento Scout Católico (MSC).

Una sobrina, del MSC, me lió para que acudiera a un campamento como voluntaria. Y lo que vi en aquellos días a través de la ventana me encantó. Tras esta experiencia decidí mover el grupo scout en Sabiñánigo y Jaca. Eso implicó asistir a cursos y formarme para ponerlo en marcha.

Comenzamos en Alto Gállego, porque ahí disponemos de la casa scout, pero en la actualidad los niños son de Jaca y ya llevamos ocho años.

-Y, ¿qué vivió en aquel campamento?

Me encantó. Acabé agotada, pero resultó muy divertido y gratificante. En plena naturaleza, sin maquinetas… en un ambiente de gran compañerismo. ¡Vuelves a ser como un niño! Resulta impresionante ver cómo todos van a una, a pesar de las diferencias y los conflictos, se forma un gran equipo.

-Movimiento Scout, ¿de qué estamos hablando?

Lo defino como pertenecer a una gran familia. Seguimos las enseñanzas de Baden-Powell, se trata de una forma de entender la vida y de educar en el tiempo libre con valores como la lealtad, el compañerismo, la vida en la naturaleza… y contamos con muchos lemas como por ejemplo: ”El scout deja los sitios mejor de lo que los ha encontrado”.

-Como madre, ¿qué le gusta del escultismo?

El profundo sentimiento de compañerismo, de saber ayudar siendo consciente de que tú no eres el único, ni el primero, sino todos iguales. Además, se aprende y se valora lo que uno, como individuo, aporta al grupo. Y destacaría un aspecto fundamental, no hay lugar para teléfonos, ni pantallas… sólo juego tradicional y al aire libre. Y sorprende, porque muchos chavales se quedan flipando.

-Y como funcionaria de Justicia.

Por mi trabajo veo a jóvenes, adolescentes que ya han hecho botellón, que se han emborrachado … y me da una pena. Además en un mundo tan materialista, me hace preciar más el trabajo que realizamos.

-Lo suyo son los scout católicos.

Sí, le damos una orientación desde la fe. Pero no se trata de un grupo cerrado, en absoluto, estamos abiertos a todos. Por curso asistimos a tres misas, la próxima se celebrará para Navidad.

-Traerán la Luz de Belén.

– Los scout de Austria son los encargados de traer desde Belén la Luz de la Paz de Belén. Este año España la recibe en Logroño y de ahí viaja a Zaragoza y se extiende por las parroquias y, en una eucaristía, se reparte entre los fieles. Y esta cadena de luz no se rompe. Nosotros la celebramos en nuestra parroquia, el Inmaculado Corazón de María de Jaca.

-¿Qué le aporta esta experiencia scout?

Alegría de vivir. Ver lo maravilloso que es la vida y a ser más positiva. Yo ya tenía experiencias con otros voluntariados, pero, la verdad, los scout enganchan mucho.

 

 

 

 

 

 

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