El Festival Internacional de Cine de Huesca concederá el Premio Luis Buñuel de su 50ª edición al director, guionista, actor y productor Terry Gilliam. El cineasta nominado al Premio Oscar estará presente en la capital altoaragonesa el miércoles 15 de junio para recibir este tributo a toda su trayectoria; una carrera donde aparecen películas que forman ya parte de la historia del cine como Brazil, El rey pescador, 12 monos, Miedo y asco en Las Vegas, Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores o Las aventuras del Barón Munchausen. Una filmografía que «posee un lenguaje cinematográfico con una clara seña de identidad y donde además el cortometraje siempre ha estado presente. No puede haber mejor nombre para este galardón y más en nuestras ‘bodas de oro'» explica Rubén Moreno, director de la cita oscense que celebra este importante aniversario del 10 al 18 de junio.
El Teatro Olimpia será la sede que acogerá la gala homenaje a la figura del cineasta de nacionalidad británica aunque nacido en Estados Unidos; una velada que culminará con la proyección de su último largometraje tras las cámaras: El hombre que mató a Don Quijote. Basada en la obra cumbre de Miguel de Cervantes, este proyecto forjó una leyenda a su alrededor tras más de dos décadas de producción y varios rodajes que se vieron interrumpidos por todo tipo de incidencias inesperadas; una historia que dio lugar incluso a su propio documental. El largometraje finalmente llegaría a la gran pantalla en 2018 cuando tuvo su premier mundial en el Festival de Cannes; protagonizado por los nominados al Oscar Jonathan Pryce y Adam Driver, el reparto acumula importantes nombres del audiovisual español como Jordi Mollá, Rossy de Palma, Óscar Jaenada o Sergi López y obtuvo también dos Premios Goya (Mejor direccion de producción y Mejor maquillaje y peluquería).
El nombre de Terry Gilliam pasa así a engrosar el imponente palmarés de personalidades que atesoran el Premio Luis Buñuel, estrellas del celuloide como Bertrand Tavernier, Marisa Paredes, Stephen Frears, Carlos Saura, Ángela Molina, Jean-Claude Carrière, Costa-Gavras, Álex de la Iglesia, Gonzalo Suárez, los hermanos Taviani o Isabel Coixet, entre muchos otros, son sólo algunos de los más recientes.
UN CINE CON SELLO DE IDENTIDAD
Terry Gilliam (Minnesota, 1939) es un cineasta en el más amplio sentido de la palabra: director, guionista, actor, productor y animador. Nacido en Estados Unidos y nacionalizado británico en la década de los 60, Gilliam fue uno de los miembros originales de los Monty Python, grupo humorístico clave en la escena anglosajona de los 60 y los 70. Su pasión por el séptimo arte despertó con nombres como Georges Mélies, Walt Disney o Stanley Kubrick.
Tras haber mostrado su talento en el mundo de la televisión, el cortometraje sería su puerta de entrada para el séptimo arte, Storytime y Miracle of Flight darían paso a su debut en el largometraje junto a su compañero de los Monty Python, Terry Jones. Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores (1975) se ha consagrado a lo largo de los años como un título clásico y una de las mejores comedias de todos los tiempos.
Gilliam probaría suerte tras las cámaras en solitario con La bestia del reino (1977) y Los héroes del tiempo (1981); un periodo donde también participaría como actor y guionista en un título icónico como La vida de Brian, Terry Jones sería en este caso el director de esta comedia ambientada en tiempos de Jesucristo. Jones y Gilliam volverían a unirse en la dirección en 1983 para rodar El sentido de la vida, pero el reconocimiento unánime de la industria le llegaría en solitario con Brazil (1985), una sátira que lograría dos nominaciones a los Oscar, una de ellas para el propio cineasta por el Mejor Guion Original.
A finales de los 80 cerraría la que se conoce como su «trilogía de la imaginación» con Las aventuras del Barón Munchausen; una cinta rodada en Belchite (Aragón) y aplaudida unánimemente por la crítica especializada, que lograría cuatro nominaciones a los Premios Oscar y se llevaría tres premios BAFTA.
La década de los 90 arrancaría con El rey pescador (1991), una cinta protagonizada por Jeff Bridges y Robin Williams, que le daría a este último un Globo de Oro y una nominación al Oscar por su interpretación. La película presentada en el Festival de Venecia, obtendría allí el León de Plata para el propio Gilliam como mejor director. Cuatro años más tarde llegaría 12 Monos, otro rotundo éxito seleccionado en Berlín; un largometraje donde de nuevo brillan grandes estrellas de Hollywood como Bruce Willis o Brad Pitt, de hecho este último conseguiría el espaldarazo definitivo para su carrera por parte de la crítica con un Globo de Oro y siendo nominado a los Oscar. El decenio lo cierra con Miedo y asco en Las Vegas para la que cuenta con Johnny Deep y Benicio del Toro, un título de culto que le llevó a competir por la Palma de Oro en Cannes.
El arranque del nuevo siglo coincide con el desarrollo y malogrado rodaje de El hombre que mató a Don Quijote, una revisión de la obra más popular de Cervantes que sufre todo tipo de problemas y vicisitudes durante su preparación, para ser finalmente cancelada y dar lugar a un documental sobre su frustrado proceso de creación.
El secreto de los Hermanos Grimm y Tideland suponen su regreso tras las cámaras, antes de adentrarse en otro proyecto plagado de dificultades: El imaginario del Doctor Parnassus. El último trabajo como actor de Hugh Ledger, una película que el interprete del Joker en El Caballero Oscuro dejó inconclusa tras su fallecimiento y el propio Terry pensó en cancelar, finalmente optaría por completar el metraje con el fichaje de otros tres actores para completar el personaje (Jude Law, Johnny Deep y Colin Farrell).
Las últimas películas del multipremiado cineasta son The Wholly Family, ganador del Premio del Cine Europeo al Mejor Cortometraje en 2011; The Zero Theorem, presentada en Venecia, y El hombre que mató a Don Quijote, el proyecto que finalmente rodó en España y vio la luz en el Festival de Cannes.
El Festival Internacional de Cine de Huesca está patrocinado por Ministerio de Cultura y Deporte, Gobierno de Aragón, Diputación Provincial de Huesca, Ayuntamiento de Huesca, Fundación Anselmo Pie y con la colaboración de Obra Social «la Caixa», Embou, Alumbra Energía, TuHuesca y el Instituto Aragonés de la Mujer. El Festival cuenta también con el apoyo de Acción Cultural Española (AC/E) a través de su Programa para la Internacionalización de la Cultura Española (PICE).