El ciclo de órgano que se celebra todos los viernes de agosto en el santuario de Torreciudad abre este día 23 el programa del fin de semana en Clásicos en la Frontera. Te paso fotos de los conciertos en Castanesa y Obarra. La organista titular del centro mariano, Maite Aranzábal, acompañada por el flautista José Menéndez ofrecerán un concierto con un variado y heterogéneo programa en el que interpretarán tanto obras de los siglos XIX, XX y XXI –de autores como el gran Iturralde, Saint Saëns, Cassadó, Graap o Guridi- como el “Congaudeant Catholici” del “Codex Calixtinus” (siglo XII) o “Le Quarte Estampie Royal” del “Manuscrit du Roi” compuesto en el XIII.
La chelista Irene Mateos y el pianista Juan Manuel Checa tomarán el relevo el sábado con un concierto que tendrá lugar en la iglesia parroquial de Secastilla. Dos músicos con una larga y solvente trayectoria que en su cita con los melómanos ribagorzanos proponen un programa con música de Beethoven, Brahms, Mendelssohn, Saint Saëns, De Monasterio y Granados.
Las propuestas musicales de Clásicos de este fin de semana concluyen en la iglesia parroquial de Lascuarre, escenario este domingo del concierto del dúo “El tango” en el que el Orlando di Bello al bandoneón y Carles Pons a la guitarra ofrecen repertorio dedicado íntegramente a la música argentina –tangos arrabaleros, tangos modernos, milongas, huellas…- que se sale del tipo de música habitual en Clásicos pero que en esta edición ya se pudo disfrutar en un delicioso concierto celebrado en El Grado. “El tango” plantean un programa con obras de Piazzolla, Boccazzi, Laurenz, Troilo, Gardel, Jobim, Villoldo, Cobian o Matos que ha despertado una notable expectación.
La misma que despertaron los conciertos de la pasada semana con un programa que se inició en Torreciudad con el segundo de sus conciertos de órgano: el de órgano a cuatro manos que trageron al santuario mariano Naji Hakim y Bernadette Dufourcet con un programa en el que mezclaron composiciones propias de ambos autores con obras de Bach o Franck.
La cita tuvo un segundo capítulo en Castanesa donde los imponderables de última hora obligaron a variar un tanto la propuesta original de un concierto a cuatro manos. La mala fortuna hizo que la intérprete femenina del dúo Iberian & Klavie se cayera por la escaleras horas antes del concierto ocasionándose unas lesiones que necesitaban reposo para solucionarse por lo que su pareja artística y sentimental tuvo que ejecutar en solitario un programa totalmente distinto del previsto -tocó un repertorio de compositores como Bach, Chopin, Schubert, Mozart, Francisco Alonso y también realizó unas improvisaciones- que solventó con notable brillantez.
Y en Obarra actuaron los integrantes del grupo de música de cámara Turiaso, quienes también cambiaron el repertorio tocando obras de Rossini, Mozart, Beethoven, entre otros, que sonó excelentemente en el abarrotado templo abacial del antiguo monasterio ribagorzano.
