José Carlos Boned, llegó a la alcaldía de Berbegal hace 13 meses con una idea muy clara en su cabeza: impulsar la puesta en marcha de una fábrica de piensos para mascotas en el polígono de la localidad. La empresa Evofeed manifestó su interés por instalarse hace ya unos 7 años, pero aunque nunca retiró su oferta, el proyecto ha estado varado a pesar de los esfuerzos del actual alcalde durante su etapa de concejal. “Cuando entramos esta nueva corporación basamos nuestras prioridades en unir al pueblo y relanzar esta fábrica. Las alcaldesas de Laluenga y de Peralta a veces preguntaban si habíamos reñido con Evofeed… para llevarse la fábrica a su pueblo”, bromea Boned. Desde el pasado mayo han debido sortear diferentes problemas. Uno de ellos, que la empresa necesitaba más metros de los que inicialmente adquirió hasta llegar a los 35.000 m2 y otro, solucionar un problemas de cotas. “El planteamiento del polígono era un poco desastroso. Existe una balsa de titularidad municipal en esa zona y corríamos el riesgo de desbordamientos así que Evofeed ha tenido que elevar el nivel de los terrenos. Ahora ya se ha sellado la plataforma y está lista para iniciar los desagües y levantar la planta”. El proyecto se ha entregado al Ayuntamiento por un valor de 1.380.000 euros. Se espera que en septiembre de 2017 entre en funcionamiento y dé empleo directo a 12 ó 17 personas. Su producción se estima en 7.000 Tn al mes de piensos para mascotas destinado a la exportación.
Y una vez desatascado este proyecto aún quedaban más temas pendientes, como la gravera que se abrió para extraer la zahorra de la carretera de Fornillos. “Se fueron sin cerrarla y la empresa ya no existe. Han sido meses duros, de mucho trajín con diferentes administraciones, pero he encontrado colaboración y se ha resuelto a pesar de que no hay un duro y lo primero que te oyes es un no”.
Ahora andan buscando una solución para el agua de boca. “Con la llegada del verano la población aumenta y se crea un cuello de botella. La bomba para subir el agua hasta el depósito de copa trabaja unas 20 horas… así que vamos a intentar que la parte baja del pueblo y las huertas se alimenten desde el depósito de agua bruta”, explica Boned.
Y para el futuro “la prioridad del Ayuntamiento es mantener. No hay dinero así que tampoco podemos embarcarnos en grandes proyectos”. Aunque sí están pensando en ofrecer un servicio de intermediarios de vivienda. “Con 94 casas vacías y los precios de venta demasiado altos… resulta muy difícil poderse quedar a vivir aquí. El censo llega a los 426, pero pernoctan 280”.
En cuanto a la supresión de la diputaciones provinciales, José Carlos Boned afirma tajante. “Si desaparecen, los alcaldes de los pequeños pueblos como yo ya se pueden ir a casa. Tendrán que pensar muy bien cómo las sustituyen, cómo dar todo ese servicio que no es sólo dinero lo que aportan, sino mucha ayuda a través de las asesorías que ofrecen”.
