Por Lola Gª Casanova
¿Qué ofrece Oxford?, ¿cómo es, en verdad, más allá del halo elitista y de las leyendas que la recorren? La barbastrense Olivia Knight Catalinete, con raíces en Graus, estudiará en Oxford el próximo curso. «Un sueño hecho realidad», afirma ella. Un logro que anhelaba desde niña y que con su tesón y el apoyo de sus padres, ha convertido en realidad.
– Me comenta que, desde muy pequeña, siempre dijo que quería estudiar en Oxford.
-Cierto, supongo que la gente debía pensar que era una fantasiosa porque lo he dicho siempre y mis notas en Primaria y parte de la ESO no resultaban brillantes. Para mí esta universidad ha sido una pasión.
-Y se puso las pilas para entrar en el Christ Church de Oxford.
-Primero me inscribí en el bachillerato internacional en Huesca porque creía que era la única vía para acceder a esta universidad, pero no me gustó en absoluto y volví a Barbastro. Y, sí, el expediente académico importa aunque no resulta lo más determinante.
-Su padre es británico y usted cuenta con doble nacionalidad… eso ¿no le ha ayudado?
-Para acceder no. Hablo inglés, pero los idiomas también se aprenden. Todos los alumnos optan en igualdad de condiciones, no existe un cupo para extranjeros o nacionales así que la competencia es feroz. Ahora mismo, hay muchos estudiantes de China y EE.UU. interesados en entrar. Todos nos enfrentamos al mismo proceso selectivo que incluye dos entrevistas personales, presentar dos trabajos y expediente. La información la obtuve en la página web del propio college. Mis padres me apoyaron, pero no me hicieron el trabajo.
En mi caso, contar con pasaporte inglés me sirve para pagar como un inglés, que resulta bastante menos. No obstante, y a pesar de los precios, la universidad ofrece becas y ayudas económicas en muy buenas condiciones a las que yo puedo optar. En principio, estudiar en Oxford suena muy elitista, pero, sinceramente, en mi caso es un sueño hecho realidad.
-Habla de college y no de Oxford.
-La universidad la componen 39 colleges, como 39 pequeñas Oxford. Yo me incliné por el Christ Church para estudiar francés y optas a ese college en concreto y no a otro. ¡El mismo en el que estudió Albert Einstein!
-Lo más complicado del proceso…
-Interpretar, trasladar lo que exigía Oxford al sistema educativo español porque apenas tienen nada en común. Para entrar también tuve que involucrar a profesores porque así me lo pedían y, la verdad, sólo tengo palabras de gratitud para el ies Martínez Vargas y aunque podría nombrar a profesores en concreto destaco a Óscar Hita que usaba el método socrático en clases y ha sido crucial para que supiera afrontar mejor las entrevistas de Oxford. A mi profesora de francés Angelines Puértolas y a Juan Ramón Puértolas del Pedro I que fue mi tutor en sexto de Primaria.
Como he señalado antes, el expediente no es lo único, valoran cómo piensas, si eres sólo un ultraempullón, no les sirves.
-¿Qué espera hacer en la universidad?
-Quiero disfrutar de la experiencia. Temo que el estudio y el trabajo no me dejen tiempo para hacer más cosas. Por ejemplo, los clubes, voy a intentar entrar en el club de debate y también me gusta el club de drama. Para entrar en el club de polo no exigen ni siquiera saber montar a caballo porque la universidad desea que todos los estudiantes dispongan de la oportunidad. Hay muchas cosas por hacer y mi idea es conocer gente muy diversa. Será lo más enriquecedor de todo.
-Comienza el curso en octubre, ahora ¿vacaciones?
-No. Voy a prepararme los discursos para el acceso al club de debate.
-Y cuando acabe el college.
-Me gustaría dedicarme a tareas relacionadas con mejorar la educación y el acceso a la misma.
