Despedimos el año y también la temporada de senderismo infantil con una excursión a Naval, para conocer un poco más los rincones y la historia de esta población alfarera y su entorno, ruta que nos prepara nuestro amigo José Zocar buen conocedor de las sendas de la localidad. El Salinar sera el lugar de encuentro de todos los participantes, en esta ocasión hemos salido de Barbastro con la idea de perder de vista la niebla, pero no ha habido suerte, en el alto de Salinas vemos que lejos de disiparse como en días anteriores, esta vez se vuelve más densa.
Comenzamos ruta rodeando el Salinar por una pista señalizada con indicadores que conduce a las trincheras y Tozal de Pisa, enseguida atravesamos el barranco de Recualdo que presenta abundante agua y barro, José ha habilitado unas tablas para su paso, después continuamos en fuerte ascenso pasando cerca de la ermita Santa Quiteria, datada en el siglo XVI con remodelaciones del siglo XVIII, y los pocos restos que quedan del Castillo de Piedra pisada, que dejamos a nuestra izquierda en medio de las brumas.
A partir de este punto, continuamos ascenso por sendero entre el bosque, que ofrece con la niebla un aspecto un tanto fantasmagórico, en ocasiones el camino resulta poco evidente y nos conduce hasta las trincheras de Pisa, en el Tozal del mismo nombre. Recorremos por su interior las que un día fueron refugio de numerosos soldados en la guerra civil, un interesante panel explicativo recuerda su historia. Continuaremos senda dando vuelta a toda la trinchera bien definida que rodea el tozal entre abundante bosque y vegetación. Aprovechamos para realizar la parada del almuerzo en este espectacular mirador de Pisa, totalmente recomendable, pero que hoy nos ha cerrado la ventana.
El descenso lo realizamos por la pista del cortafuegos de Monte Pisa hasta la carretera de Salinas a Naval, donde esperamos a José y Martin que harán de enlace para recoger a los conductores. El tiempo no nos ha acompañado hoy, tampoco las vistas, sí la persistente niebla que nos invade estos días y que hoy ha subido hasta el Tozal de Pisa, situado a más de 800 metros, también nos ha acompañado el buen ambiente de convivencia y camaradería de todo el grupo.
Ahora llega el paréntesis de invierno, nos volveremos a encontrar con el senderismo infantil y familiar en el mes de marzo, con nuevas propuestas de rutas y muchas ganas de compartirlas con todos vosotros.
