Última jornada del Festival Jazz’n Graus

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La actuación de la Tune Up como teloneros del Ronald Baker Quartet, pondrá punto y final este sábado a la tercera edición del Festival Jazz’n Graus que se ha venido desarrollando en las últimas semanas en esta villa ribagorzana y en su núcleo de Bellestar. El concierto comenzará a las 19,30 en la Plaza Mayor grausina y ha despertado un notable interés por la calidad del Ronald Baker Quartet y por el conocer el desenvolvimiento encima del escenario de los Tune Up.
Esta última banda es una formación emergente radicada en Ribagorza. Sus componentes comparten la satisfacción de hacer música juntamente con la amistad que les une. Instruidos en la Escuela de música local y formando parte de distintos combos su trayectoria les ha llevado a reinterpretar temas de bossa-nova, Horace Silver o John Coltrane con énfasis rítmico y cierto aire latino. En esta ocasión, para su puesta de largo ante los grausinos, cuentan con el inestimable refuerzo de acreditados músicos profesionales. Willi Waller, trompeta y armónica, Víctor Planas, bajo, Javier Cinca, guitarra, y “Luigi”, batería, conforman esta formación de la que se esperan grandes cosas.
Y el Ronald Baker Quartet es, sin duda, el grupo con más cartel de todo el programa del Festival. Su líder, que da nombre a la formación, nació en Baltimore en noviembre de 1968 y tras desarrollar en tierras estadounidense su etapa formativa, dar sus primeros pasos encima del escenario y conocer a grandes artistas del jazz como Donald Byrd, JJ Johnson, Jon Faddis, emigró a Paría, ciudad en la que ha llevado a cabo su carrera artística y en la que ha presentado algunos de sus seis CD en solitario.
Se considera a Ronald Baker como uno de los grandes trompetistas de las últimas generaciones del jazz norteamericano en la diáspora, un intérprete a la altura de los grandes representantes del instrumento de pistones. Como sideman, ha trabajado con músicos de la talla de Big Joe Turner, Ricky Ford y Jesse Davis.
Fiel a la tradición, Ronald Baker canta y toca con una exquisita sensibilidad. Como instrumentista se declara heredero de los grandes trompetistas de la historia del jazz, con un estilo cálido e intimista que a menudo ha sido comparado con Miles Davis, Chet Baker o Roy Eldridge.
Como cantante, su voz aterciopelada y rítmica es a menudo emparentada con las voces de Al Jarreau y George Benson. Baker es también muy apreciado en los circuitos de blues europeos y norteamericanos y ha participado en innumerables festivales de jazz por todo el mundo.
Le acompañan Ignasi González, contrabajo; Xavi Hinijosa, batería y Gerard Nieto, piano.

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