Tras consultar la decisión con los vecinos del municipio, el Ayuntamiento de Capella ha anunciado la suspensión de la festividad de San Isidro tanto por la inmediatez de la puesta en marcha de las medidas de desescalada del confinamiento generalizado como por las restricciones varias que esta situación conlleva. Por ello, el consistorio ha decidido no celebrar este año ni los actos religiosos ni los civiles con que se conmemora todos los 15 de mayo en Capella esta celebración de san Isidro, una fiesta con un gran predicamento en el mundo rural y estrechamente vinculada con las tareas agro ganaderas.
Angela Sarriera, alcaldesa capellense, reconoce que no se ha previsto una alternativa temporal a la suspensión de la conmemoración de la festividad ya que ésta, de relativamente reciente creación en la localidad, está directamente vinculada a San Isidro como fiesta directamente vinculada con los agricultores y ganaderos que forman un sector productivo clavc en la vida local.
Pese a su reciente implantación, en condiciones normales la fiesta se vive con mucha intensidad en Capella y cuenta con momentos tan emotivos como el de la siempre concurrida bendición de los tractores y maquinaria agrícola que se realiza en el entorno del monumental puente medieval de la localidad.
