Mucha alegría y satisfacción en Estadilla por el resultado de su trail. Cansancio también, a raudales, pero todo compensaba al ver cómo había transcurrido la jornada. No hubo corredores perdidos, ni incidentes, se instalaron más avituallamientos, el calor apretó y las pruebas gustaron y mucho. En total, participaron 213 corredores uno más que en la pasada edición y se contó con más de 50 voluntarios de la localidad. Ese es el ambiente que se respiraba y así nos ha relatado Cristina Martínez, corredora habitual de la sierra y miembro de la organización de este evento.
La gran incógnita giraba entorno a la ultratrail que se estrenaba con un formato de 42 kilómetros y que se podían salvar en individual o en equipos por relevos (un equipo femenino y otro mixto competían en esta modalidad). La maratón les llevó hasta tierras de Fonz y Alins. Y a este desafío se apuntaron diez equipos en relevos y cinco en individual. Según la organización «demasiado esfuerzo para tan pocos participantes». Sin embargo, al sorpresa vino al finalizar las pruebas los atletas comenzaron a asegurar, felices, que en la próxima edición se apuntaban a la larga. «Esto nos anima. Hay un punto en común, todos destacan las vistas, la belleza de la sierra y además, que después hay cena y música. Lo cual no es nada habitual en la organización de estas pruebas», afirma Martínez.
Los deportistas llegaron principalmente de Barbastro, Monzón pero también Zaragoza, Lérida o Vilafranca del Penedés y los de fueran repetían.
(Las fotos son gentileza de la organización y de Susín).
