El municipio oscense de Bárcabo volvió a elaborar las tortetas el pasado sábado, 14 de enero, para así conseguir volver a recuperar una tradición ya perdida en el pueblo.
22 mujeres se juntaron ese día dispuestas a pasar una jornada de lo más entretenida elaborando tortetas, un plato típico que llevaba sin hacerse unos 20 años tras dejar de hacer las matacías. Las tortetas se elaboran con la sangre del cerdo, grasa, harina y especias, consiguiendo así una masa con la que se hacen bolas para cocerlas en el caldero y hacerles en ese momento un agujero en medio.
Según indica la alcaldesa del núcleo de Bárcabo, Carmen Lalueza, ese día ya se decidió que sería “la primera vez de muchas” debido a la gran participación que hubo y a los buenos resultados obtenidos tras haber pasado una muy buena jornada que permitió volver a degustar aquellos sabores típicos que muchas de las ahí presentes recordaron nada más sacarlas del caldero. “Las probamos ese mismo día y luego las repartimos entre las participantes que también se llevaron para darles al resto de vecinos”, cuenta Lalueza.
Esta actividad nació de la mano de los talleres que en el municipio ya se realizan semanalmente desde Cruz Roja, quienes ofrecen diferentes actividades y talleres a los vecinos de Bárcabo. Uno de estos talleres consistió en la recuperación de recetas tradicionales, entre las que salió la idea de las tortetas, una receta típica de la zona que anteriormente se realizaba en el municipio tras haber llevado a cabo la matacía.
La idea de volver a recuperar esta tradición fue muy bien acogida tanto por el propio ayuntamiento como por todas las mujeres de Bárcabo, que finalmente se pusieron manos a la obra para celebrar el día de San Antonio el fin de semana más cercano al 17 de enero.
