Nunca dejaremos de recomendar los balnearios de Aragón. El turismo termal es una opción siempre atractiva, sin importar la edad, la salud o el presupuesto de cada persona. Y en Huesca, Zaragoza y Teruel existe una variada selección de establecimientos que se convertirán en tu alternativa ideal para disfrutar de una escapada, ya sea en familia o en solitario, y desconectar del bullicio de la ciudad. A continuación te mostramos los mejores sitios para hacerlo. No te los pierdas.

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En estos tiempos de prisas, de no parar, un nuevo movimiento comienza a hacerse notar: los balnearistas. Los balnearistas son aquellas personas que han despertado para precisamente practicar el noble arte de descansar. Y es que no se trata del ruido que generan, sino de su capacidad de apagarlo.
Reivindican el derecho a desconectar del estrés del día a día, a dejar de ir de cabeza para venir de cabeza a los centros termales de nuestro entorno. Esto les abre la puerta a un universo de aguas mineromedicinales, paisajes de ensueño y sabores auténticos, es decir, el bienestar en su forma más pura. ¿Su territorio? Los Balnearios de Aragón. ¿Su filosofía? Recuperar el tiempo perdido y abrazar el buen vivir.

Balneario de Panticosa

Entre todos los balnearios de Aragón, probablemente el más conocido sea el Balneario de Panticosa, ubicado en el Pirineo oscense. Tras atravesar una etapa de decadencia, en los últimos años ha recuperado su esplendor gracias a una renovación integral. El objetivo es claro: reafirmarse como uno de los principales destinos turísticos del Valle de Tena y un referente en el turismo termal de España.

El complejo cuenta con dos hoteles de 4 cuatro estrellas, el Gran Hotel y el Hotel Continental, además de varios puntos de restauración, donde se combinan las mejores materias primas para dar lugar tanto a recetas tradicionales como a los platos más sofisticados. El Balneario de Panticosa cuanta con 4 restaurantes: Restaurante el Lago ubicado en el Gran Hotel, La Brasserie y El Restaurante Buffet, ubicados en el Hotel Continental y la Pizzeria La Fontana. Además de varios puntos de cafetería.

 

Balneario Vilas del Turbón

Sumérgete en el manantial Virgen de la Peña, el verdadero corazón del Balneario Vilas del Turbón. Este lugar, conocido desde hace tiempo por sus aguas termales, es perfecto para una amplia gama de tratamientos médicos, que abarcan desde problemas renales hasta respiratorios. Sin embargo, no es necesario tener alguna afección para disfrutar de sus instalaciones; el entorno y el paisaje que lo rodea son simplemente hermosos.

La estancia cuenta con 55 habitaciones completamente equipadas con baño privado, calefacción, TV y teléfono, además de acceso directo a la zona de balneoterapia. Esta área incluye una piscina termal cubierta, una piscina exterior disponible en verano, y un gimnasio. Los huéspedes pueden disfrutar de diversas comodidades, como un restaurante, una cafetería, una tienda, un salón de juegos y TV, así como servicios adicionales como peluquería, capilla y alquiler de bicicletas de montaña (BTT).

 

Balneario Termas Pallarés

Cuando mencionamos que reyes y escritores se han hospedado en las Termas Pallarés de Alhama, ya te damos una idea del glamour que envuelve a este lujoso complejo hotelero y termal. Sin embargo, este elegante lugar no se limita a su historia, ya que ha sabido modernizarse y adaptarse al siglo XXI. Lo que se mantiene intacto es el placer de disfrutar de un baño en su lago termal único en Europa, donde el agua permanece a 28 grados durante todo el año. ¡Una experiencia realmente reconfortante!

El Balneario Termas Pallarés alberga tres destacados hoteles que ofrecen bienestar y confort: El Hotel Termas, emblemático de inspiración colonial, fue construido en 1860 y reabierto en 2011; el Hotel Parque, de estilo clásico y 3 estrellas, dispone de 90 habitaciones dobles con vistas a los jardines y la mayor zona de tratamientos termales; y por último el Gran Hotel Cascada, que se sitúa junto al Lago Termal, y combina la arquitectura histórica del Balneario con un diseño moderno. Ofrece 13 habitaciones superiores, 10 junior suites y una suite exclusiva con terraza privada.

 

Balneario Alhama de Aragón

Otra importante localidad termal en la provincia de Zaragoza es Alhama de Aragón, situada también en la comarca de Calatayud. Las propiedades beneficiosas de sus aguas son conocidas desde hace siglos, al punto de que se dice que hasta el Cid las aprovechó durante su paso por Aragón. No es casualidad que las encantadoras fuentes termales que alimentan los tratamientos de este hotel lleven nombres tan evocadores: los manantiales del Moro y de la Mora.

Se trata de un hotel de cuatro estrellas con 121 habitaciones, totalmente equipadas y todas ellas exteriores con magníficas vistas. Su restaurante está especializado en comida tradicional aragonesa y además cuenta con una amplia oferta de platos dietéticos. Siete salones y tres terrazas son los espacios ideales para la celebración de cualquier tipo de evento.

 

Balneario de Sicilia

Jaraba, en la comarca de Calatayud, es la localidad con mayor concentración de balnearios en Aragón. Entre las diversas opciones, comenzamos con el Balneario Sicilia, cuyo rasgo más emblemático es su impresionante piscina termal situada dentro de una cueva. Pero eso es solo el comienzo; lo más notable de este complejo son las variadas terapias que brindan a sus visitantes, quienes siempre salen renovados y revitalizados.

Este hotel de cuatro estrellas cuenta con 120 habitaciones dobles, cada una equipada con baño privado, terraza, aire acondicionado, teléfono y TV. Ofrece un amplio salón comedor con capacidad para 300 personas, ideal para eventos y comidas grupales. Además, el hotel dispone de salones sociales, una sala de lectura, una sala de TV, una tienda y un bar-cafetería con terraza cubierta, creando un ambiente acogedor y completo para el disfrute de los huéspedes.

 

Balneario de La Virgen 

En Jaraba también hay que hablar del Balneario La Virgen, situado en un entorno natural impresionante, en pleno cañón del río Mesa. En este enclave brotan aguas termales de gran valor terapéutico. ¿Tienes problemas digestivos, respiratorios o del sistema nervioso? Quizá te interese descubrir cómo este lugar puede ayudarte.

Su hotel se encuentra completamente reformado, con 100 habitaciones dotadas de baño propio, caja fuerte de alquiler, televisión, teléfono y calefacción para proporcionar el confort y el descanso posterior a la gran cantidad de tratamientos termales que ofrece el Balneario. De hecho, la galería termal está directamente conectada con las habitaciones. Por otro lado su restaurante de cocina regional elabora menús para celíacos, vegetarianos y diabéticos.

 

Balneario Paracuellos del Jiloca

Sin alejarnos de la comarca de Calatayud, encontramos Paracuellos de Jiloca, donde nos espera uno de los balnearios más destacados de Aragón. Este lugar alberga una de las mejores zonas de aguas sulfuradas a nivel europeo, que han sido llevadas a su máxima expresión mediante sus modernas instalaciones. Aquí se ofrecen circuitos tanto terapéuticos como relajantes, además de tratamientos de belleza que gozan de gran popularidad.

El hotel, con capacidad para 110 huéspedes, fue completamente restaurado en 2006; y ofrece un restaurante y dos cafeterías, así como diversas instalaciones para el ocio, como un gimnasio, un solárium, y una piscina exterior. También dispone de salas de reuniones, una sala de juegos, una sala de TV, y una biblioteca. Todo ello en un entorno rodeado de amplias zonas ajardinadas. Además, los clientes pueden disfrutar de tarifas especiales en el campo de golf ubicado a tan solo 2 kilómetros del Balneario.

 

Balneario de Ariño

Cambiando de escenario y de provincia, nos trasladamos a Ariño, en Teruel, en pleno Parque Cultural del Río Martín. Aquí, los manantiales de los Baños de Ariño han recibido una importante inversión que ha dado lugar a un moderno centro termal. Este complejo cuenta con un hotel de cuatro estrellas, un restaurante y un equipo de expertos que ofrece a sus visitantes las técnicas hidrotermales más innovadoras.

El Balneario está integrado con un hotel de 4 estrellas que ofrece un ambiente de ocio y tranquilidad, destacándose por su atención cercana y familiar. Presenta espacios amplios y luminosos, con 46 habitaciones que incluyen terrazas y son ideales para observar buitres leonados y cabras montesas en las inmediaciones del entorno. Su restaurante, La Alcuza, ofrece una propuesta gastronómica innovadora, con productos aragoneses de temporada y opciones variadas, incluyendo menús especiales y un buffet.

 

Balneario de Manzanera

En plena Sierra de Javalambre se encuentra el Balneario de Manzanera El Paraíso. Este espacio promete revitalizar tanto el cuerpo como el alma, gracias a las propiedades de sus aguas y a la atmósfera que nos transporta a tiempos pasados, conservando ese encanto romántico que asociamos con un balneario tradicional. ¡Una experiencia altamente recomendable!

Este hotel de 3 estrellas cuenta con una capacidad para 125 huéspedes y ofrece habitaciones equipadas con televisión, teléfono y calefacción central. Las instalaciones incluyen un restaurante, una cafetería y dos salas acristaladas, además de una sala de lectura que dispone de biblioteca y ordenadores, con conexión a internet wifi en todo el establecimiento.

Entre las opciones de ocio, destacan su piscina exterior, una pista de pádel, una pista de futbito, canastas de baloncesto, mesas de ping-pong, una zona de petanca, una capilla, un parque infantil y la posibilidad de alquilar bicicletas de montaña. También hay cuadras para caballos particulares, parking cubierto y un parque biosaludable.

 

Segura Balneario

En Baños de Segura encontramos un balneario moderno que sorprende a todos sus visitantes. Sus instalaciones están completamente equipadas y diseñadas siguiendo las últimas tendencias en bienestar, haciendo que sus aguas mineromedicinales hayan alcanzado otra categoría gracias a esta audaz revitalización.

El hotel de 4 estrellas del Balneario de Segura destaca por su decoración étnica y su centro termal de última generación donde disfrutar de sus tratamientos. Y un restaurante en el que el producto de cercanía y temporada es el protagonista. Todo en plena naturaleza aragonesa.

 

 

 

 

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