Los vecinos de la Urbanización de Cerler, una promoción inmobiliaria de titularidad privada en la parte alta de esta localidad, han hecho público su malestar ante los reiterados cortes de agua corriente que padecen este verano.
Una problemática que, según denuncia Óscar Caparrós, uno de los afectados, se viene repitiendo «desde hace un montón de años» y que está llevando a una situación de desesperación a los más de sesenta vecinos de la urbanización y a los gestores del hotel colindante directamente implicados por estos cortes de agua «prolongados, recurrentes y que en ocasiones nos dejan hasta dos días sin agua».
«El problema –apunta Caparrós- es que estos cortes afectan sólo a nuestra urbanización mientras que el resto del pueblo sí tiene agua». Ello ocurre porque esta zona se alimenta de un pequeño depósito específico para ella que está situado en la parte más alta del pueblo, mientras que el resto de la localidad se surte de otro más dimensionado a las necesidades del vecindario.
Los promotores de la urbanización –la empresa Aramón- habían previsto realizar la pasada primavera unas obras de ampliación del depósito que no se pudieron llevar a cabo porque la crisis del coronavirus alteró todos los planes y ahora, en plena temporada alta y con toda la urbanización ocupada, es inviable realizar una actuación de estas características.
Los vecinos afectados han apelado en numerosas ocasiones a la empresa promotora y al ayuntamiento benasqués sin que se haya solucionado el problema. «Nos mandan de uno a otro y, al final, no hay ninguna actuación concreta», comentan unos vecinos que este pasado lunes remitían al consistorio una nueva solicitud rogando de la comprensión de los responsables consistoriales que «más allá de quien sea responsabilidad el tema y por el bien de la salud pública» les dejen asearse en alguna instalación municipal mientras se solventen los cortes de agua corriente en sus domicilios..
«Estamos profundamente preocupados; estamos viviendo una situación de emergencia sanitaria, tenemos niños menores y personas mayores al cargo, y se está poniendo en grave riesgo su salud», señalan los afectados en su carta mientras expresan su preocupación por la calidad en el suministro de agua potable que están recibiendo ya que el depósito se está rellenando desde un torrente cercano sin tratamiento previo del agua.
Desde el ayuntamiento de Benasque reconocen que han recibido las quejas y que son conscientes de la delicada situación que viven estos vecinos pero señalan que poco pueden hacer ya que se trata de una urbanización de carácter privado que no ha sido asumida por el consistorio debido a que hay varios temas urbanísticos pendientes, entre ellos el de este depósito de agua. También se ha hecho un llamamiento a la responsabilidad ya que se ha detectado que varias personas realizan una utilización excesiva del agua del depósito en cuestión para regar céspedes y jardines en un momento de máxima presión por la elevada ocupación de las viviendas de la urbanización. «Es un depósito pequeño que además tarda en recuperarse y no se le está dejando rellenar, por lo que los problemas se van a cronificar si no asumimos la necesidad de tener especial cuidado con los consumos de agua», señalan en el consistorio.
