En casa Palacio de Tramaced (Hoya de Huesca), las Navidades continúan como si aún estuvieran vivos los abuelos Antonio Casanova y Quiteria Ponz. Y esto se nota en el menú, en la decoración y en los asistentes. Berta Peña Casanova, la nieta de Antonio y Quiteria, nos cuenta que “si se cambiase un solo detalle ya no sería Navidad. Parecería cualquier domingo de celebración, pero no Navidad”. A casa Palacio acuden Berta con su marido Raúl y su hija Carmen; sus tías Teresa y Esther con su primo Héctor llegados desde Zaragoza y su tío Enrique con su hijo Gustavo que viven en Sodeto. En casa les esperan sus padres Mari Carmen y Joaquín y su tío Jesús.
El menú de la abuela Quiteria se respeta: en Nochebuena cardo con bacalao y costillas de cordero a la brasa. En Navidad: entrantes, consomé de Navidad y un sabroso guiso. Otro indispensable: empanadico hecho en casa y con calabaza del propio huerto familiar. “El empanadico es muy celebrado. Mi madre lo hace, también conserva la receta mi tía Rosario, que vive en Barbastro. No creo que puedas probar uno mejor que estos“.
Para estas próximas Navidades llevan la idea de juntarse… “aunque viendo cómo sube la incidencia de la covid me entra miedo. Deseo de corazón que nos reunamos. Espero que sí… aunque nunca se sabe”. Las pasadas Navidades estuvieron cada uno en su casa: “Fueron raras y extrañas. Mi hija era muy pequeña y continuó con su horario habitual. Y yo, a las 22.30, me fui a dormir ¡con eso te lo digo todo!. Mi tío Jesús lo sintió mucho. El año pasado nos vimos una tarde con abrigo en el salón y las ventanas abiertas”.
Ahora con una niña pequeña todo se mantiene igual pero resulta más divertido “aunque no hay Papa Noël porque nosotros celebramos los Reyes”. Para 2022, Berta pide salud y “que podamos librarnos de esta pandemia”.
