En algún momento del pasado fin de semana, varias decenas de las carrascas plantadas los días 12 y 17 en un paraje de la Montañeta del Palomar para conmemorar el Día Internacional del Árbol, fueron arrancadas o pisoteadas por personas cuya identidad se desconoce.
El alcalde, Álvaro Burrell, como máximo representante del Ayuntamiento, ha expresado el “fuerte malestar e irritación” por una acción vandálica a la que nadie puede encontrarle el menor sentido. “Es un agravio a los niños que plantaron las carrascas, al esfuerzo municipal por reforestar y, sobre todo, a la naturaleza. Vamos a estar vigilantes y pedimos la colaboración ciudadana para denunciar este tipo de actos de gamberrismo y falta de respeto a las más elementales normas de convivencia”, ha declarado.
La Ley de Montes califica de infracción leve un daño como el descrito (el valor de la reposición es inferior a 10.000 euros). No obstante, un artículo indica: “La corta, quema, arranque o inutilización de ejemplares arbóreos o arbustivos de especies forestales puede ser sancionada con multa de 100 a 1.000 euros y obligatoriedad del infractor de reparar el daño causado en la forma y condiciones fijadas por el órgano sancionador”. El Ayuntamiento ha presentado denuncia ante el Seprona de la Guardia Civil.