El Ayuntamiento de Monzón va a ejecutar la remodelación de la Plaza Romabelo, que supondrá una nueva configuración para conseguir la prevalencia de uso peatonal y de esparcimiento ciudadano para lo que se colocarán nuevos equipamientos y mobiliario dejando un espacio libre en el centro de la plaza que garantice el tránsito de vecinos y viandantes, en cumplimiento de una resolución de El Justicia de Aragón de 2018, atendiendo una queja de los vecinos de la plaza que reclamaban su uso público. En la actualidad su superficie la ocupa la terraza de un establecimiento hostelero con quien se han mantenido diversas reuniones y se le han planteado diferentes posibilidades para ubicar sus veladores.
Nuria Moreno, concejal de Urbanismo, ha explicado que se cambia el actual concepto “en el que la mayoría de la plaza tiene un uso privativo a su uso originario para el que fue donada. Se va a configurar la plaza como un espacio de lectura entre el público infantil y adulto, mediante la colocación de asientos y plataformas de madera que permitan realizar esta actividad. Por último, se incorporarán elementos que permitan el intercambio de libros o la generación de actividades de “Cuenta Cuentos”.
La concejal explicaba que “atendemos la demanda de los vecinos y acatamos una resolución de El Justicia de Aragón en la que reclaman recuperar el uso público del espacio por lo que hemos apostado por esta remodelación que permitirá a los padres e hijos disfrutar de un espacio adaptado para fomentar, por ejemplo, actividades culturales y lúdicas. Hemos hablado con el propietario del establecimiento hostelero y la actual terraza se desplaza a la zona de carga y descarga donde podrá seguir funcionando. Un espacio para veladores idéntico al que mantienen otros hosteleros”.
La inversión de esta actuación es de unos 30.000€ y la intención es ejecutarla en los próximos meses.
VECINOS
En un escrito los vecinos de la Plaza Romabelo explican que: “Una persona, ya fallecida, quien había sido concejal de Monzón, D. Eugenio Campo Gallifa era propietaria de un solar de unos 300 m2 junto a su casa y decidió donarla al Ayuntamiento el 10/12/1984 con la condición pactada en documento de que allí se ubicara una zona verde para la ciudad.
Bastantes años después alguien encuentra un local de 45 m2, casualmente enfrente de una zona verde y primero pregunta al Ayuntamiento si podría instalar unos veladores allí, el lugar era la superficie que había recibido en donación la ciudad, la Plaza Romabelo. Los servicios técnicos municipales informan favorablemente la instalación de 12 mesas y 48 sillas en la plaza, sin que se mencione lo de zona verde. A continuación, contrata en alquiler el local y solicita licencia de actividad para instalar en el mismo un bar en cuyo proyecto dice que el altillo se utilizará para almacén, ya que por la altura que tiene no se permite el uso por los clientes; le es autorizado con esa y otras limitaciones. A continuación, solicita la licencia para veladores que es autorizada por el concejal de urbanismo el 18/10/2016.
Ahora, pensemos en cuando nosotros hacemos una donación de cualquier clase a una persona o entidad. Lo primero que queremos es que nuestra generosidad vaya para el fin previsto ya que de no ser así se nos va a quedar cara de tontos, además de sentirnos defraudados y desgraciadamente, todos conocemos o hemos sufrido situaciones semejantes
Además de lo anterior y después de más de ocho años transcurridos, en la Plaza Romabelo hemos visto que es imposible transitar por el centro de la plaza por la ubicación de mesas, sillas y toldos, por no hablar de la música muy alta tanto en el bar como en el altillo, y los gritos y juergas en el bar, la plaza, o la acera a cualquier hora del día, o a avanzadas horas de la noche y en cualquier día de la semana, hechos estos, que han obligado a los vecinos a tener que llamar en innumerables ocasiones a la policía municipal.
Las zonas verdes son para uso y disfrute de todos los vecinos de Monzón, y el uso particular, privado y acotado que ha tenido estos últimos ocho años la Plaza Romabelo no concuerda muy bien con los fines previstos para ellas. Tanto el uso que ahora se está planificando para la plaza, como cualquier otro de carácter público que pudiera plantear el Ayuntamiento de Monzón, es el que los ciudadanos, propietarios al fin y al cabo de esta ZONA VERDE, merecemos”.