Después de más de cuarenta años que llevamos en el valle del Aragón suspirando y reclamando la reapertura del Canfranc, no ha hecho más que ponerse, manos a la obra, el maestro pastelero Lorenzo Echeto y, en un pis-pas, la línea Madrid-Canfranc-París ha vuelto a renacer en el escaparate de la afamada pastelería de este gran jacetano de pro: visita obligada al pasar por Jaca para golosos, lamineros y demás turistas… El obrador de Echeto ha logrado lo que no han conseguido los diferentes despachos de tantos políticos aragoneses: El Canfranc ya es, de nuevo, una realidad. En la plaza de la Catedral, todos a ver el tren de chocolate de Echeto: obra maestra para toda la Jacetania que este año tampoco ha faltado a su tradicional cita de Pascua.