“Una vez terminadas las fiestas de Santiago 2022 toca dar las gracias a todos los que habéis participado y habéis hecho que sean unas de las mejores fiestas desde hace muchos años, se han notado las ganas de fiesta acumuladas en estos dos años tan duros para todos y ha sido gratificante ver gente de todas las edades pensando solo en pasarlo bien y divertirse”, decía cansado, casi exhausto, el hostelero David Pinós, “no imaginábamos que vendría tanta gente, nuestro calculo eran las fiestas de 2019, pero se han superado con creces, se han agotado tapas, cervezas y todo, hemos trabajado veinte horas diarias, han sido unas fiestas espectaculares”.
Carlos Sampériz, alcalde de la Villa, hace un balance muy positivo de estos cinco días, “en todos los actos, sin destacar uno de otro ha habido muchísima participación”, señala el edil opinando que, “se ha captado el espíritu de la alegría, de compartir, de felicidad, y no es un tópico”.
También resalta la capacidad resolutiva de la Comisión de fiestas, “siempre surge algún problema, si bien el resultado ha sido muy satisfactorio y todo ha funcionado de maravilla”.
A los grañeneses les gusta mucho la fiesta, “llevábamos dos años en el congelador y pensábamos que había ganas de fiesta, pero ha desbordado las previsiones de todo”, incluso, añade Sampériz, “de los tres chupinazos preveíamos que habría una bajada de expectación de uno a otro, pero no ha habido ninguna diferencia, ninguno ha perdido ni un ápice de intensidad”.
Ahora toca descansar, repasar esas fotos que Raúl Rivarés ha hecho día tras día y en todos los actos festivos, y que aquí podéis ver, y, por supuesto, ir organizando las Fiestas 2023, “va a ser muy difícil superar las del 2022, pero se intentará y se logrará”, concluye el alcalde.