Las calles del antiguo núcleo urbano de Mequinenza volvieron a llenarse de vida, música y tradición este domingo con motivo de la celebración de “Sant Jordi al Poble Vell” 2025. Una cita que los mequinenzanos tienen marcada en el calendario y que, un año más, ha demostrado su poder de convocatoria y su valor como evento de cohesión social y cultural y que estuvo precedida el sábado de un concierto lleno de “perversiones” de canciones muy conocidas a ritmo de jazz, swing y bossa nova de la mano de Sancho&Swing.
El buen tiempo ha acompañado, y vecinos y visitantes se han animado a acercarse al antiguo núcleo urbano de Mequinenza, desaparecido por la construcción del embalse de Riba-roja, a disfrutar de una jornada marcada por el buen ambiente, la participación y un completo programa de actividades en un entorno cargado de historia. Desde primera hora de la mañana, el tren turístico no dejó de trasladar visitantes entre el núcleo urbano actual y el Poble Vell, junto al Ebro, en una conexión simbólica entre pasado y presente.
La jornada comenzó con una misa de campaña junto a las ruinas de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, acompañada por el Coro de Mequinenza. Más tarde, la Orquesta Municipal llenó de música el Espacio Jesús Moncada del Museo de la Historia con un concierto ecléctico que utilizó los idiomas como hilo conductor para hilvanar un repertorio que levantó el ánimo y el aplauso de los asistentes. A continuación tuvo lugar el tradicional vermú popular en la Plaça d’Armes, con aperitivos elaborados por las diferentes asociaciones locales.
Durante toda la mañana, los Museos de Mequinenza ofrecieron visitas guiadas gratuitas que agotaron las plazas disponibles y se pudo votar la instantánea favorita de las 19 que se presentaron a la edición 2025 del concurso Mequinenza de Foto, cuyo fallo se dará a conocer en breve. Además, los más pequeños disfrutaron de actividades infantiles en la Plaza de los Museos, organizadas desde el Spai Jove, con un taller de tatuajes no permanentes que fue todo un reclamo para pequeños y mayores y parque de hinchables incluido. Además varios artesanos instalaron sus paradas en la zona del Balcón del Ebro, desde el que puede contemplarse la confluencia de los ríos Segre y Ebro.
El Ayuntamiento de Mequinenza agradece la implicación de asociaciones, colectivos y vecinos en la organización y desarrollo de esta cita que año a año refuerza la identidad y el orgullo local. “Sant Jordi al Poble Vell” sigue consolidándose como una celebración que pone en valor el patrimonio, la cultura, la memoria y la convivencia en un escenario único.