El alcalde de Monzón, Isaac Claver, el arquitecto Jorge Tárrago, y la representante de la UTE, Raquel Galiano, han firmado el acta de inicio de los trabajos y colocación de la primera piedra de las obras de rehabilitación de la Institución Ferial-nave polivalente- Azucarera de Monzón que cuenta con un presupuesto de 4.230.464,37€ y un plazo de ejecución de un año y medio aproximadamente, estando prevista su finalización en marzo de 2026.
El proyecto tiene una subvención conseguida de fondos europeos por importe de 2.356.999,57€ de la línea 2 de la convocatoria de ayudas para la rehabilitación de edificios de titularidad pública (PIREP), en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. La UTE Proforma Ejecución de Obras y Restauraciones S.L. -Mascún Obra Civil S.L. se encarga de la ejecución del proyecto redactado por el arquitecto Jorge Tárrago y su equipo.
Jorge Tárrago ha agradecido “el apoyo del Ayuntamiento desde el primer momento y sus técnicos al proyecto que tiene tres objetivos: rehabilitar la nave, mejorar su eficiencia energética en más de un 80% y mejorar su relación con la ciudad con una nueva entrada desde el parque y mejores accesos, siempre con la premisa de servicio a la ciudadanía”.A la dirección de obra del proyecto se suma Miguel Domper.
En total se rehabilitan 2.290m2, a los que se suman 1.516 de ampliación, más 1.015 de urbanización, es decir, la nave resultante casi duplica los metros de la actual.
Isaac Claver, tras agradecer el trabajo de todos los departamentos y personas implicadas en el proyecto, ha explicado que “hoy estamos ante un día histórico. La Azucarera fue la primera gran industria de la ciudad que marcó una época siendo el motor y sustento para muchos montisonenses y vecinos. Cien años después marcamos otro hito. Con la colocación de esta primera piedra, comenzamos las obras de un proyecto en el que llevamos más de tres años de trabajo. Se trata de mucho más que una obra, estamos ante la rehabilitación de un símbolo propio de la identidad de nuestra ciudad, damos un salto del siglo XX al siglo XXI para convertirla en un referente del futuro de Monzón. Esta nave es nuestro recinto ferial en el que hemos albergado multitud de eventos y ferias como Fercomex, Arteria, feria del Libro, chiquicinca o la Movida… El proyecto que vamos a desarrollar supone la evolución y modernidad sin perder de vista el origen y nuestro pasado. Es la obra más potente, de iniciativa municipal, que se ha desarrollado en la historia del Ayuntamiento y nos va a permitir tener un espacio digno y en condiciones acorde a lo que merece nuestra ciudad. Gracias a esta obra podremos realizar ferias, congresos, eventos y conciertos cumpliendo toda la normativa y con aforos de hasta casi 3.000 personas. Además, será una nave plenamente accesible y conseguiremos casi duplicar su dimensión actual”.
Recordar que el proyecto se encuentra como prioritario dentro del Plan Estratégico #MiMonzón2030 con un concurso de ideas para arquitectos que nació a principios de 2022, año en el que se presentó a los fondos europeos, que se resolvieron en la primavera de 2023. Desde entonces, se trabajó en la licitación del proyecto y su ejecución que corrió a cargo del arquitecto Jorge Tárrago, que, además, es catedrático en la Universidad de Navarra.
Javier Camo, director general de Ferias, ha destacado que “es importante que los ayuntamientos mejoren sus infraestructuras que permitan desarrollar ferias adaptadas a las necesidades actuales, no se pueden hacerl como hace 20 años, así que es fundamental este esfuerzo en una ciudad que tiene una oferta ferial potente lo que , sin duda, son impactos en la hostelería, el comercio o el turismo, por tanto, esta nueva nave polivalente fortalecerá esta oferta “.
Los fondos PIREP no permiten derribar la nave sino rehabilitarla, así que se mantiene la esencia de la infraestructura centenaria, pero adaptándola a las necesidades y normativa del siglo XXI con todas sus medidas de seguridad.
Al acto de la colocación de la primera piedra ha acudido el Director General de ferias del Gobierno de Aragón, Javier Camo, los concejales Marta Montaner Durán, Nuria Moreno, Jairo Sánchez, Eliseo Martín y Carlos Loncán, el presidente de la Comarca del Cinca Medio, José María Civiac, representantes de asociaciones de vecinos como Javier Camer y Francisco Jose Fragüet, directores de ferias como José Luis Escutia y José Ramón Villa y representantes de la UTE y del equipo redactor, entre otros.
PROYECTO
Fechas importantes: Concurso de ideas mayo 2022 / diciembre 2023, proyecto julio 2024, inicio de obra noviembre de 2024 y final de obra estimado marzo de 2026.
La primera premisa se basa en la conservación de la edificación original hasta donde es posible, asumiendo las sucesivas transformaciones y derribando y rehaciendo aquello que no sea reutilizable (que, en cualquier caso, se reciclará o revalorizará). Esto es, se recupera la morfología original para transformar la nave en un espacio multifuncional y polivalente al servicio de la ciudad.
La segunda premisa es definir las acciones imprescindibles para devolver el edificio a su vida útil (reparación de morteros, mejora de aislamientos, reparación y/o mejora de forjados y soleras, etc.). Eso permite recuperar su imagen de patrimonio industrial heredado y aumentar el potencial y versatilidad de todos los espacios. La recuperación de la imagen de edificio industrial devuelve al lugar el carácter de símbolo de una época, a la vez que hacen de nuevo al edificio y su entorno partícipes de la reactivación de la ciudad y de su compromiso con el espacio público, las nuevas tecnologías y la sostenibilidad.
La tercera premisa es establecer un diálogo con el contexto y la historia más amplio, incluyendo el parque de la Azucarera; los nuevos espacios porticados replican el carácter modular del edificio original, pero con un lenguaje más contemporáneo, y actúan como una extensión física del parque, permitiendo salvar la diferencia de cota entre la ciudad y el parque para enfatizar su accesibilidad universal y la unidad del espacio público.
La cuarta premisa es elaborar una propuesta sostenible medioambientalmente, tanto respecto a la preexistencia como a la nueva intervención, que parte de presupuestos termodinámicos. Adosada al sur de la nave se plantea una pieza de nueva planta, a modo de vestíbulo, tanto en planta baja como en el nivel de planta primera, que actúa a modo de invernadero para generar un efecto de colchón térmico.
La quinta premisa es la construcción de una pieza de servicios y a modo de ‘mochila energética’, adosada a su alzado este y entre ésta y la nave contigua, que alberga todos los servicios generales (almacenamiento, aseos, camerino, despachos y comunicaciones) y agrupa las instalaciones y con la que garantizaremos obtener el primer edificio PEB (Positive Energy Building) de Monzón, muy por encima de los objetivos PIREP y hacerlo en los plazos de ejecución previstos.
HISTORIA
La Azucarera fue la primera industria implantada en Monzón en el año 1929. La localidad, eminentemente agrícola, vio modificado notablemente su paisaje desde la construcción de la primera fábrica, que acogía toda clase de producción remolachera de la provincia de Huesca y gran parte de la de Lérida. En 1970 la industria fue desmantelada. Posteriormente, ha pasado de ser una fábrica alejada del centro urbano de Monzón a integrase perfectamente en el tejido urbano al convertirse en un parque municipal conservando y rehabilitando parte de los elementos que conformaban el conjunto original. Este edificio fue adquirido por el ayuntamiento y realizó distintas modificaciones.