ALCOLEA DE CINCA: Dúo Santoral

0
649

3/SEPTIEMBRE/2021 VIERNES/FESTIVAL

El dúo Santoral, Elvira L. Vallés y Alberto Solobera, fue nominado como mejor banda y su último trabajo, el LP Pecado sin Espinas, mejor disco del año en los XXI Premios de la Música Aragonesa, que se entregaron en octubre de 2020. La libertad de su sonido y de sus letras, mezclada con la idea de fundar una nueva religión en la que el dios es la música, ha dado lugar a un proyecto inclasificable que ellos mismos denominan Pop surrealista.

El dúo nace en 2018 y ese mismo año comienzan a grabar su primer EP, Ahora te llamas Garbo. Con influencias de Beach House, Buñuel o Christina Rosenvinge, mezclan dream y electro pop con muchos estilos y sin ningún complejo, creando verdaderos quebraderos de cabeza a quienes se empeñan en poner etiquetas a su música. Cada tema es una experimentación con sonidos que juega a saltarse las estructuras tradicionales.

Alto de la Cruz. Alcolea de Cinca

Situada en la orilla derecha del río Cinca, el topónimo de Alcolea de Cinca rememora un castillo o fortaleza musulmán (al caliza), una época que dibujará un casco urbano con calles estrechas y laberínticas. Abunda la arcilla en los alrededores y por ello la construcción típica en ladrillo. Fuera del casco urbano, destaca el conjunto arqueológico de La Codera que reúne en pocos metros un patrimonio de gran valor que abarca desde la Edad del Bronce a la época prerromana.

Para el Alto de la Cruz, desde Alcolea de Cinca tomamos una senda ascendente que serpentea dirección suroeste, y tras unos 350 metros de subida, sale a una pista de tierra que avanza por la izquierda de los cortados erosionados, conocidos como ripas, de una colina que «parece cortada a cuchillo» como escribiría Ramón J. Sender. A escasos metros de salir a la pista llegamos a este mirador coronado por una gran cruz de cemento, que sustituye otra de madera ubicada en el mismo lugar que antiguamente localizaba la desaparecida ermita. Desde el Alto de la Cruz veremos las ripas y sasos característicos del paisaje que se abre entre el Cinca y la estepa monegrina, uno de los más sorprendentes de la península Ibérica.

Si queremos completar la ruta circular, esta continúa llaneando por el camino principal, próximo a los cortados. Llega un momento en que el recorrido se separa unos metros del serrado para acercarse a los sasos de Alcolea, la mayor y mejor conservada zona esteparia del Cinca Medio.

A unos 3 km desde el inicio, aparece una pequeña construcción de piedra en ruinas y, pocos metros después del edificio, la ruta inicia el fuerte descenso que conduce a la carretera HU-V-8611, desde donde las vistas son bien distintas. Tras disfrutar de estas maravillosas formaciones geológicas, el itinerario regresa al pueblo por el mismo camino.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.