Agentes del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil de Huesca, procedieron el pasado 11 de noviembre a la detención de seis personas por un delito contra la salud pública y otro de pertenencia a organización criminal.
En el marco de la lucha contra la delincuencia organizada asentada en la provincia de Huesca, el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (en adelante, EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Huesca se encarga de la investigación de delitos graves cometidos por grupos organizados, específicamente la lucha contra el tráfico de drogas; teniendo también como misión, apoyar y/o coordinar aquellas investigaciones policiales complejas en las que se cometan delitos causantes de gran alarma social, perpetrados por grupos organizados, generalmente abarcando su ámbito de actuación de esta provincia, y que precisan la implicación de los miembros de este grupo de investigación, debido a su alto grado de especialización delictual.
A principios del año 2023 se tuvo conocimiento a través de distintas fuentes, de la existencia de un punto de venta de droga, concretamente cocaína, en la localidad de Grañén lo que generó una gran alarma social en el seno de dicha localidad. Dicho punto era conocido con el símil del nombre de una conocida marca de comida rápida de recogida en vehículo.
Comprobadas las primeras informaciones recibidas, se dió inicio a la OPERACIÓN GRAKO, cuyo objetivo fue la desarticulación completa de este punto de venta, así como la de sus principales líneas de suministro. Eliminando de esta forma la sensación de inseguridad generada en los ciudadanos de la localidad de Grañén derivada de la “impunidad” con la que obraban los miembros de la organización criminal.
Durante el trascurso de la investigación se detectó un nuevo punto de venta de droga en la misma localidad, que, a su vez ejercía, de punto de abastecimiento del primer punto de venta detectado.
Derivado de una exhaustiva labor investigadora, se pudo determinar cuáles eran las principales líneas de abastecimiento de los puntos de venta de droga investigados, obteniéndose dos en Huesca y uno en Zaragoza.
Tras la identificación plena de las personas que ejercían de suministradores, así como su “rol” dentro de la organización criminal del resto de las personas encartadas, se procedió con fecha 11 de noviembre, a la práctica de 5 registros domiciliarios: dos en la localidad de Grañén, dos en la ciudad de Huesca y uno en la ciudad de Zaragoza.
En los registros llevados a cabo, se intervinieron los siguientes efectos:
- 88 gramos de cocaína.
- 5.95 kilos de marihuana en cogollos.
- 63 gramos de hachís.
- Sustancias de corte.
- Diversas balanzas de precisión.
- 39.438 euros de dinero en efectivo.
- Un arma de fuego corta.
- Una defensa extensible.
- Numerosas armas blancas (Machetes, dagas, navajas…).
- Arma simulada de guerra.
Por todo lo relatado se procedió a la detención de tres varones y dos mujeres en la localidad de Grañén; y dos varones en la ciudad de Huesca. Todos ellos de edades comprendidas entre 26 y 46 años.
La operación ha sido dirigida por el Grupo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Guardia Civil de Huesca. Además de los anteriores, ha participado personal de la USECIC (Unidad de Seguridad Ciudadana) de Huesca, Zaragoza y Teruel, personal de Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de Zaragoza, el Servicio Cinológico y patrullas de seguridad ciudadana de la Compañía de Huesca, así como Equipo Territorial de Policía Judicial de Barbastro.
Los detenidos fueron puestos a disposición de la Autoridad Judicial junto con las diligencias instruidas, que fueron entregadas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 4 de Huesca, el cual decretó prisión provisional para cuatro de los encausados y libertad con cargos para los otros tres.