Era una ceremonia que no se había vivido en la localidad desde hacía más de treinta años. El pasado domingo y tras los preceptivos cursos formativos a los que han acudido en los últimos meses, diez jóvenes –y no tan jóvenes- residentes y vinculados a la localidad ribagorzana de Torres del Obispo recibieron la confirmación de manos del titular de la diócesis Barbastro-Monzón, monseñor Ángel Pérez, en una jornada plenamente festiva.
La celebración tuvo lugar en la abarrotada iglesia parroquial y en un ambiente de comunión vecinal que tuvo su continuación en el vecino salón social donde los confirmantes invitaron a un vermú a todos sus convecinos. Posteriormente, los protagonistas de la jornada y sus familiares compartieron una comida de confraternización en el restaurante local como punto y final de una ceremonia que –por la tremenda despoblación que padece el medio rural- cada vez es menos frecuente que tenga lugar en buena parte de nuestros pueblos.