Desafiando al frío que marcó en lo climático la jornada y a la nieve que se acumulaba en el último tramo del recorrido previsto, veinticinco integrantes y amigos del Centro Excursionista Ribagorza participaron este domingo a la excursión programada por la entidad al emblemático pico Turbón como homenaje a quien fuera durante muchos años su presidente, Enrique Canellas.
Una excursión que partía desde Serrate a las 8,15 de la mañana por la pista de la Plana hasta el refugio de la Plana, donde se celebró un sencillo y muy emotivo acto de recuerdo para Canellas. Finalizado el homenaje, desde aquí salieron siete de los participantes para coronar el Turbón enfrentándose a la nieve y el hielo acumulado en este último tramo del recorrido. Uno de ellos no pudo culminar la ascensión por problemas con el material pero los otros seis hicieron cima y aprovecharon para recoger el Belén artesano y montañero colocado por el CER días antes de las fechas navideñas.
«Fue una intensa y sentida mañana excursionista con el espíritu de Enrique alentando en todos los presentes», apunta el actual presidente del CER, Carlos Bravo, quien destaca las palabras de María José, una neófita en las convocatorias del Centro que reflejó en las redes sociales sus impresiones destacando que «ni siquiera el frío ha podido con la calidez de la excursión».
La expedición estaba conformada por participantes de diversas procedencias, algunos de ellos integrantes de Montañeros de Aragón que pretendían escalar el Turbón y se quisieron sumar al homenaje en el que las albadas y el folclore grausino se hermanaron con uno de los entornos más queridos por el homenajeado. «Enrique encarnó siempre valores de bonhomía y de apoyo a los demás que son los que queremos que sigan marcando el rumbo de nuestro Club», señala Carlos Bravo.