Lejos de calmar los ánimos con los habitantes de los municipios por cuyos términos municipales se extienden los parques naturales aragoneses, la reunión convocada este miércoles por el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, y la directora general de Sostenibilidad, Sandra Ortega, con los presidentes de los espacios protegidos aragoneses va a generar una intensa polémica ante la más que evidente divergencia en las opiniones de los representantes municipales y residentes en las zonas de influencia de los espacios naturales y las esgrimidas por los representantes de la administración autonómica.
En el encuentro, Olona y Ortega señalaron que el Gobierno de Aragón quiere potenciar los patronatos de los espacios naturales protegidos para que su papel sea más importante en la gestión de los mismos. Según una nota de prensa remitida por el departamento convocante del encuentro, este es el principal mensaje que el consejero y su directora general transmitieron a los presidentes de estos órganos en la reunión que mantenían con ellos en la tarde de este miércoles. «Los patronatos son estructuras de representación de todos los agentes implicados en la gestión de los recursos de los espacios naturales y es preciso que todos ellos colaboren, se responsabilicen y aúnen esfuerzos» señalaba Ortega, para quien «la situación actual reclama un protagonismo directo de estos agentes para impulsar la conservación y el desarrollo socioeconómico».
Con estas palabras se refería a la financiación de los espacios, una de las principales preocupaciones de los presidentes. En este sentido, Olona manifestaba que, en su opinión, durante años se ha transmitido una idea falsa: que la conservación genera desarrollo por sí misma, «cuando la realidad es que sin el talonario de la Administración, como ahora se está viendo, no hay desarrollo». Para el consejero, el modelo es erróneo y requiere un cambio de enfoque ya que entiende que «la debilidad del presupuesto es consecuencia de la debilidad del sistema, que no ha sabido gestionar bien los recursos de los que ha dispuesto».
Gerencias socioeconómicas.
Con respecto a las gerencias socioeconómicas, la directora general considera que «duplican otras estructuras perfectamente implantadas en el territorio y dedicadas al desarrollo socioeconómico del medio rural». Por ello, el consejero abundó en que, a su juicio, no es cierto que la supresión de estas gerencias suponga el abandono del territorio. Olona recordó en la reunión que ya existen las comarcas, los grupos de acción local y las propias oficinas comarcales del departamento, entre otras entidades, trabajando en el territorio y consideró que las oficinas medioambientales no tienen sentido y por ello deben ser eliminadas.