Este domingo tenía lugar una nueva jornada de visitas comentadas a las pinturas medievales de la Iglesia Templaria de Santa María Magdalena de Cofita, cuya gestión está concedida por el obispado de Barbastro-Monzón a la Comarca de Cinca Medio, que en los últimos años ha llevado a cabo varios trabajos de conservación y restauración, como ha sido el arreglo de la cubierta que tenía serias goteras, como las prospecciones en busca de pinturas murales, halladas en estos últimos 3 años en uno de los laterales de la iglesia.
En esta jornada, el nuevo presidente de la Comarca mediocinqueña, José María Civiac, acompañado de varios consejeros, se ha acercado a conocer los últimos trabajos realizados en las pinturas y aseguraba que se va a establecer un plan de gestión turística de las mismas, estudiando las tareas necesarias para que el templo se presente en las mejores condiciones para las visitas, y también se hablará con ayuntamiento de Monzón y en la propia Comarca para diseñar un producto conjunto con otros legados templarios en la zona como son el Castillo de Monzón, la Catedral de Santa María del Romeral o la Iglesia de Valcarca.
La iglesia románica de Santa María Magdalena de Cofita fue construida y fundada por la Orden del Temple, entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII, durante su permanencia en la Encomienda del castillo de Monzón (s. XII-XIV). En septiembre del año 2019, y a petición de la Comarca del Cinca Medio, el Gobierno de Aragón declaró Bien de Interés Cultural, (BIC) a la Iglesia de Santa María Magdalena, en la categoría de monumento, por su valor histórico, arquitectónico y artístico. Aún no se habían descubierto las pinturas murales datadas en los siglos XII-XIII, y que dan aún más valor a este monumento templario.