El pasado sábado 19 de octubre, Biscarrués fue escenario de la 5ª KDD Biscarrués-Reino de los Mallos Bike, un evento que reunió deporte, patrimonio y convivencia en un ambiente muy positivo. El Ayuntamiento de Biscarrués y el Club Ciclista Reino de los Mallos, junto con la colaboración del Área de Deportes de la Comarca de la Hoya de Huesca y Murillo BikePlanet, organizaron esta jornada que contó con la participación de 40 ciclistas en tres emocionantes actividades.
Ruta de 35 km: La primera actividad, con 10 participantes, fue una exigente ruta que recorrió paisajes de gran valor patrimonial. Partiendo de Biscarrués, el recorrido atravesó la margen derecha del río Gállego, pasando por lugares emblemáticos como la ermita de Concilio y el puente de Murillo, y ofreciendo espectaculares vistas del Reino de los Mallos y San Juan de la Peña. Los ciclistas disfrutaron del retorno por rápidas pistas y senderos, completando una jornada que unió naturaleza, deporte y cultura.
Ruta de 18 km: Catorce ciclistas participaron en una segunda ruta más accesible, que recorrió los alrededores de Biscarrués, cruzando antiguos caminos como la «Dula», subiendo entre campos de olivos y almendros y descubriendo rincones como Valderrasal. Esta ruta combinó deporte y la visita a la pequeña localidad de Piedramorera, ofreciendo a los participantes un recorrido diverso e interesante.
Actividad infantil: La jornada también tuvo espacio para los más pequeños, con un circuito de habilidades en la plaza mayor de Biscarrués, donde 18 niños y sus familias participaron en una divertida sesión de entrenamiento. Después del calentamiento, los más jóvenes completaron una ruta de 10 km que incluyó la visita a Valderrasal y parte del sendero botánico de Biscarrués.
La jornada concluyó con una comida en Biscarrués, donde los participantes expresaron su satisfacción por el evento, que no solo fue una prueba deportiva, sino también una oportunidad para descubrir el patrimonio local. Además, la organización puso a disposición guías titulados, seguro y asistencia mecánica, garantizando una experiencia segura y enriquecedora para todos.
El evento destacó no solo por su éxito organizativo, sino también por la importancia de fomentar la práctica deportiva en contacto con la naturaleza. Los participantes pudieron disfrutar de rutas por paisajes únicos que combinaban el desafío físico del ciclismo con la apreciación del patrimonio natural y cultural de la zona. Este tipo de iniciativas refuerzan el vínculo entre deporte y medio ambiente, promoviendo un estilo de vida saludable y el respeto por el entorno. Al recorrer caminos históricos y espacios naturales de gran valor, como el Reino de los Mallos y Valderrasal, los ciclistas no solo hicieron deporte, sino que también contribuyeron a la revalorización de estos paisajes rurales.
Este tipo de actividades resaltan la importancia de preservar y conocer nuestro patrimonio natural mientras se fomenta la convivencia y el disfrute colectivo.