Confiesan que fue una experiencia «inolvidable» y que la repetirán «con gusto» si se la proponen. Los Gaiteros de Graus animaron la Noche de San Juan en Sahún y vivieron intensamente la celebración de las fallas –les falles- de la localidad.
Unas fallas que son espectaculares en todos los sentidos y con las que los habitantes de esta localidad ribagorzana tienen una comunión indisoluble desde hace incontables generaciones.
El sonido de la gaita y los sones que se han oído desde hace siglos en los valles pirenaicos fueron un excelente complemento a esta mágica celebración y contribuyeron a realzar un ritual de renovación y renacimiento que brinda año tras año por la regeneración y el futuro.