La localidad de Aínsa concluye el mes de enero con un total de 807 personas habiendo pasado por la oficina de turismo municipal, lo que supone posicionarse como uno de los cinco mejores eneros desde el año 2001, al mismo tiempo que supera en un 1,77% los datos registrados en 2023. El comienzo de 2024 se salda, por otro lado, con el notable incremento del turismo internacional, un 21,4% más que en la temporada pasada, y un crecimiento del 68% en el caso del viajero francés, a quien en los últimos meses se había echado especialmente de menos.
En la procedencia nacional, eligen Aínsa como destino invernal los habitantes de Zaragoza ciudad, Cataluña, Huesca, Comunidad Valenciana y Madrid, mientras que entre los visitantes extranjeros Aínsa resulta elegida para noruegos, belgas y alemanes, destacando el indiscutible liderazgo de los vecinos franceses. «Enero es un mes tradicionalmente tranquilo, aunque hemos visto en los últimos años un crecimiento sostenido del turismo de Aínsa como destino alternativo a la nieve», destaca Beatriz Salcedo, concejala de desarrollo y promoción turística. «Todo ello ha venido auspiciado por la reciente apertura del túnel de Bielsa durante las veinticuatro horas del día, favoreciendo el aumento de los turistas extranjeros y especialmente de los que viven más cerca de la frontera».
Las temperaturas favorables y las fiestas repartidas por todo el municipio han contribuido al dinamismo con el que se han vivido las primeras semanas del año. Tras concluir la concurrida Cabalgata de Reyes, cogieron el relevo en la agenda de eventos las hogueras y los encuentros vecinales en honor a los Santos Barbudos, llenando de alegría núcleos como Gerbe, Castejón de Sobrarbe, Coscojuela, Paúles de Sarsa, La Pardina, Latorrecilla, Guaso, Arcusa y Santa María de Buil. Aínsa, por otro lado, celebró su fiesta de invierno por San Sebastián el pasado sábado 20 de enero, congregando a más de 200 personas en la comida popular. La última cita se producirá este fin de semana en el pueblo de Banastón para celebrar La Candelera y Santa Águeda.
