El municipio de Tella-Sin se une a la defensa del medio rural y demanda soluciones para un sector primario que arrastra problemas estructurales. En palabras de su alcalde, Feliciano Sesé, “al final ha tenido que caer una gota que ha colmado el vaso”. “Hace años con el dinero por el que podías vender una explotación de 150 ovejas te podías comprar un piso”, explica. “Hoy en cambio no alcanza ni para pagar la entrada”. Ese desequilibrio entre precio y costes es donde habría que poner el foco, afirma Sesé, así como en reducir la burocracia que se entorpece la actividad del sector.